Necesita Biden de votantes afroamericanos para levantar su campaña

Columbia.- Incluso antes de que los resultados finales de New Hampshire mostraran al exvicepresidente Joseph R. Biden Jr. terminando un decepcionante quinto lugar, Biden voló a Carolina del Sur el martes por la noche, para asistir a una fiesta que cumplía con todos los requisitos para una celebración victoriosa. Un coro de gospel estuvo presente para cantar himnos de salvación, una elección adecuada para un candidato que está contando en este estado y en su gran electorado afroamericano para salvar su tercer intento de poder llegar a la Casa Blanca.

“Hasta ahora, no hemos tenido noticias del electorado más comprometido del Partido Demócrata, la comunidad afroamericana”, dijo Biden a unos 200 entusiastas partidarios, muchos de ellos afroamericanos. Luego agregó: “99.9 por ciento. Ese es el porcentaje de votantes afroamericanos que aún no han tenido la oportunidad de votar en Estados Unidos”.

La capacidad de movilizar el apoyo afroamericano en Carolina del Sur, entidad que celebrará su primaria el 29 de febrero, y en todo el Sur, ha sido durante mucho tiempo la base de la candidatura de Biden, una supuesta ventaja que destacaría su capacidad para forjar una coalición diversa y así derrotar al presidente Trump.

Sin embargo, mientras Biden espera que los votantes afroamericanos resuciten su candidatura después de las derrotas en Iowa y New Hampshire, han aparecido grietas en ese apoyo, en algunas encuestas y entre demócratas locales y nacionales influyentes, que dicen en voz alta lo que muchos han creído en privado todo el tiempo: que el vicepresidente era un seguro y familiar bastión político tanto como un objeto de afecto.

Mientras que Biden sigue siendo el favorito entre muchos líderes del partido estatal, varios demócratas de Carolina del Sur dicen que otro candidato, Tom Steyer, se ha convertido en un factor importante en la contienda primaria aquí. Steyer, un multimillonario de California, ha estado cortejando agresivamente a los votantes afroamericanos, gastando mucho en publicidad y derrochando dinero en negocios en todo el estado.

Las ventajas políticas que alguna vez parecieron una formalidad para la campaña de Biden —como el respaldo al demócrata más poderoso del estado, el representante James E. Clyburn— ahora son inciertas; dos personas familiarizadas con el pensamiento de Clyburn dicen que está cada vez más preocupado por respaldar a un candidato que no tiene una victoria garantizada ganar en el estado.

Otros dos funcionarios demócratas afroamericanos en la entidad respaldaron el miércoles a uno de los rivales de Biden, Pete Buttigieg, quien había luchado durante la mayor parte de la campaña para amasar cualquier tipo de apoyo afroamericano.

Y una nueva encuesta esta semana mostró que a apoyo de Biden entre los votantes afroamericanos a nivel nacional había caído este mes al 27 por ciento, en comparación al 49 por ciento del mes pasado.