Insiste Biden en promesa sobre infraestructura

El presidente Biden y su equipo han entrado a la modalidad de “hacer más con menos” en su agenda económica, dictada por las realidades políticas de un Congreso estrechamente dividido.

El compromiso bipartidista sobre un paquete de infraestructura que Biden acordó el mes pasado con senadores centristas sólo otorgará el 40 por ciento de lo que Biden propuso inicialmente para la banda ancha, vehículos eléctricos e infraestructura acuífera en el Plan de Empleo Estadounidense que dio a conocer en el mes de marzo.

Sin embargo, funcionarios de la Casa Blanca insisten en que el acuerdo bipartidista podría lograr todos los objetivos del presidente, incluyendo reemplazar cada tubería de agua potable en Estados Unidos y conectar cada vivienda a un internet de alta velocidad.

En un discurso que pronunció este miércoles, Biden no mostró ningún indicio de que esté disminuyendo sus ambiciones.

Los asesores de Biden aseguran que han encontrado maneras creativas para sacarle el mayor provecho a los recursos federales, usualmente impulsando la inversión privada, con el fin de mantener los grandes objetivos del presidente en su programa económico.

Las negociaciones que tendrá representarán un mayor desafío para la visión expansiva de Biden sobre reformar la economía estadounidense con nuevas y costosas intervenciones gubernamentales para impulsar las industrias avanzadas y entrenar y apoyar a los trabajadores para el futuro.

Su objetivo en las próximas semanas será lograr lo más que se pueda de esa agenda con un par de propuestas y es improbable que pueda gastar todo lo que él desea, aunque su legado económico depende de las decisiones que tomen él y sus líderes congresistas.