Fundación Heritage, que en algún tiempo fue militarista, se opone a ayudar a Ucrania

Washington.— Horas antes de que la Cámara votara en este mes para aprobar 40 mmdd de ayuda militar y humanitaria para Ucrania, los cabilderos afiliados a la Fundación Heritage, un prominente grupo de conservadores, estuvieron presionando en privado a los republicanos para que se opusieran a esa medida.

En un esfuerzo que acaparó la atención de los conservadores de todo Washington, Jessica Anderson, directora ejecutiva de la operación de cabildeo de Heritage, dio a conocer un comunicado titulado “El paquete de ayuda a Ucrania deja al final a Estados Unidos”, enmarcando la medida como negligente y mal considerada.

“Estados Unidos tiene problemas con una inflación que está estableciendo récords, una enorme deuda, una frontera porosa, el crimen y problemas de energía y los progresistas de Washington están dándole prioridad a un paquete de ayuda a Ucrania por 40 mmdd”.

La postura de la Fundación Heritage ayuda a explicar por qué 57 republicanos de la Cámara votaron finalmente en contra del paquete, siendo la demostración más marcada de la oposición en las filas del partido al profundo apoyo del Congreso al esfuerzo de Ucrania para frenar la invasión de Rusia.

También reflejó la creciente potencia del impulso “Estados Unidos Primero” en el Partido Republicano y cómo ha permeado lentamente al pensamiento de los líderes que están cambiando su política y su punto de vista mundial.

También fue una muestra del creciente desafío que confrontan los líderes del partido que han luchado para mantener a raya a las fuerzas anti-intervencionistas en sus filas en caso de que la guerra se prolongue, como creen oficiales estadounidenses que así será, lo cual provocará que la administración Biden busque la aprobación de otro paquete de ayuda en los próximos meses.

La postura también refleja un profundo cambio en la Fundación Heritage, una organización que los conservadores han considerado desde hace tiempo como una guía intelectual y política.