Encuestas favorecen a Biden; podría ir por más en debate

Nueva York— Actualmente, dos eventos tienen la posibilidad de cambiar una competencia estable: la esperada nominación de la juez Amy Coney Barrett para reemplazar a la juez Ruth Bader Ginsburg en la Suprema Corte, y el primer debate general de la elección que se llevará a cabo el martes por la noche.

Trump podía colocar a un tercer juez en la Suprema Corte de la nación, afianzando su legado para una generación.  Aunque la estrategia de hacerlo no necesariamente lo ayudaría en el corto plazo.

La pérdida de un ícono feminista de ese puesto podría ser una fuerza motivadora para los votantes demócratas, tanto como lo fue para los republicanos la muerte del juez Antonin Scalia en el 2016.

La próxima batalla de la confirmación volverá a poner bajo los reflectores el aborto y el Decreto de Atención Asequible, lo cual pondría en riesgo a los votantes estadounidenses de más edad y a los moderados que viven en los suburbios, a los que el presidente ha estado tratando de atraer, además de energizar a los demócratas progresistas más jóvenes que mostraron más entusiasmo por la juez Ginsburg que por el nominado demócrata Joseph Biden.

Sin embargo, el debate, que es un escenario en donde el presidente, que constantemente ha estado en desventaja durante meses por siete u ocho puntos en los sondeos públicos, tiene su mejor oportunidad de sacudir la dinámica de la competencia.

Es un momento en donde hay mucho en juego para Biden, un candidato que apenas y ha sido visto haciendo campaña. Aunque Trump lo ha ayudado disminuyendo las expectativas de su desempeño.