PUBLICIDAD
Estados Unidos
domingo, 20 diciembre 2020 | 19:04
PUBLICIDAD
La idea ha estado dando vueltas en Washington durante años, y el mundo de la inteligencia ha debatido acaloradamente sus méritos. Pero una decisión siempre se ha pospuesto porque Cyber Command, la organización de una década que lidera las operaciones ofensivas y defensivas del ejército en todo el mundo, sigue dependiendo en gran medida de la inteligencia proporcionada por la N.S.A., la agencia de descifrado de códigos que tiene 68 años.
Pero cuando la idea revivió en los últimos días con una recomendación en camino al presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Mark A. Milley, para que actuara antes de que el presidente Trump deje el cargo el próximo mes, provocó una tormenta de protestas en el Capitolio. Tanto demócratas como republicanos dicen que las dos instituciones están demasiado entrelazadas para ser administradas por separado y que cualquier acción unilateral por parte de la administración para cambiar la estructura actual violaría los requisitos legales de evaluaciones extensivas antes de modificarla.
Dijeron que tampoco estaba claro cómo un paso así, especialmente llevado a cabo apresuradamente durante una transición presidencial, ayudaría con la crisis actual. Estados Unidos todavía tiene las manos ocupadas para averiguar hasta dónde penetraron los rusos en los sistemas gubernamentales, qué adquirieron, cómo fallaron las defensas estadounidenses y cómo responder.
En los círculos de seguridad nacional, existe un debate sobre si este fue otro ejemplo de la disminución del personal de Trump tratando de impulsar cambios duraderos en sus últimos 30 días en el cargo, o tal vez una represalia contra el general Paul M. Nakasone, el ciber-jefe de cuatro estrellas que ocupa ambos puestos.
PUBLICIDAD
ENLACES PATROCINADOS