Crisis bancaria cuelga sobre la economía, volviendo a aparecer el temor a la recesión

Nueva York.- En repetidas ocasiones, la recuperación económica de Estados Unidos ha desafiado las predicciones de una posible recesión, soportando los retrasos en la cadena de suministros, escasez de mano de obra, conflictos globales y el incremento más rápido en las tasas de interés en décadas.

Esa resiliencia enfrenta actualmente una nueva prueba: una crisis bancaria que, en ocasiones durante la semana pasada, pareció decidida a convertirse en un total desplome financiero, mientras el precio del petróleo disminuyó y los inversionistas compraron deuda del gobierno de Estados Unidos y otros activos percibidos como seguros.

Este viernes los mercados permanecieron volátiles --- las acciones tuvieron su peor día de la semana --- mientras los líderes en Washington y en Wall Street buscaron contener la crisis.

Aun cuando esos esfuerzos fueran exitosos --- los veteranos de crisis anteriores advirtieron que ése era el gran “detalle” --- economistas dijeron que el episodio podría cobrar inevitablemente la factura en la contratación e inversiones y que los bancos se retirarían del otorgamiento de créditos y las empresas tendrían problemas para solicitar préstamos como resultado de esto.

Algunos encargados de hacer pronósticos dijeron que esa turbulencia provocaría que sea más probable una recesión.

Como mínimo, la crisis ha complicado la de por sí delicada tarea que enfrentan los funcionarios de la Reserva Federal, quienes han estado tratando de disminuir la economía gradualmente para controlar la inflación.

Esa tarea es más urgente que nunca: la información de este martes del gobierno mostró que los precios siguieron aumentando rápidamente en febrero.

Aunque ahora, los legisladores deben frenar el riesgo de que los esfuerzos de la Reserva Federal para luchar contra la inflación pueda desestabilizar el sistema financiero.

Ellos no tienen mucho tiempo para sopesar sus opciones: funcionarios de la Reserva Federal llevarán a cabo sus próximas reuniones habituales el martes y miércoles en medio de una incertidumbre inusual acerca de lo que harán.

Hace 10 días, inversionistas esperaban que el banco central re-acelerara su campaña de incrementos a las tasas de interés en respuesta a una información económica más fuerte de lo esperado.

Ahora, los observadores de la Reserva Federal están debatiendo sobre si la reunión terminará sin cambio en las tasas de interés.