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Estados Unidos
sábado, 27 junio 2020 | 17:25
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Washington— Hay que decirles adiós a los elevadores.
Habrá cambios a esta manera diaria de transitar verticalmente, ahora que los trabajadores empiecen a regresar a los altos edificios de Nueva York y otras ciudades.
El paseo en elevador, que duraba unos 90 o más segundos, se ha convertido en un rompecabezas para calcular la manera en que la gente puede regresar a trabajar de manera segura después de la pandemia del coronavirus que los ha mantenido en casa durante meses.
Los empresarios y encargados de los edificios están planeando reglas estrictas para subir: límites en el número de personas, al parecer sólo podrían usarlo cuatro personas, lugares designados para pararse y maximizar la distancia social, el uso obligatorio de mascarillas, las personas tendrán que mirar hacia el frente en todo momento --- y no deberán hablar.
Algunas empresas están contratando “asesores de elevadores” para encontrar cuál es la mejor manera de lograr que miles de empleados regresen a sus escritorios, equilibrando el riesgo de la densidad del elevador contra un posible abarrotamiento mientras las personas esperan su turno --- ya que por los menos tendrán que mantenerse a una distancia de seis pies.
Al reflejar un interés generalizado y preocupación, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades planean sopesar a principios de la próxima semana algunos lineamientos para los elevadores y escaleras eléctricas.
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