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Estados Unidos

Cláusula impuesta por Trump le impide vivir en Mar-a-Lago

En sí, el acuerdo de 1993 establece que Mar-a-Lago es un club social y nadie puede residir en esa propiedad, escribió Reginald Stambaugh

The New York Times

jueves, 17 diciembre 2020 | 12:50

Associated Press | Una lancha patrullera de la Guardia Costera de EU pasa por la propiedad del presidente Donald Trump en Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida

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Nueva York— Los vecinos del presidente Trump en Florida están buscando aplicar un pacto que tiene décadas de antigüedad, que dice que Mar-a-Lago, su club social privado, no puede ser usado como una residencia de tiempo completo --- ya que Trump ha sugerido que planea hacerlo después que abandone la Casa Blanca.

Vecinos de Mar-a-Lago le enviaron este martes una carta a Town of Palm Beach y al Servicio Secreto de Estados Unidos, quejándose de que Trump ha violado el acuerdo que data de 1993 que él hizo con esa población y que le permitió convertir esa propiedad en un club para ganar dinero.

“En sí, el acuerdo de 1993 establece que Mar-a-Lago es un club social y nadie puede residir en esa propiedad”, escribió Reginald Stambaugh, abogado que representa a la familia DeMoss, que tiene una propiedad enseguida de Mar-a-Lago.

“Para evitar esa vergonzosa situación para todos y darle al presidente el tiempo para hacer otros arreglos para vivir en esa área, confiamos en que ustedes colaborarán con el equipo y les recordarán el uso de los parámetros del acuerdo”, escribió Stambaugh.

“Palm Beach tiene muchas agradables propiedades en venta y con toda seguridad él podrá encontrar una que satisfaga sus necesidades”.

La carta se envió cuando están por concluir los días que pasará Trump en la presidencia y está elaborando planes para mudarse con su esposa e hijo a Florida después de la inauguración de su sucesor, el presidente electo Joseph R. Biden, el 20 de enero.

The New York Times reportó en el 2018 que Trump había cambiado su domicilio a Mar-a-Lago, en parte debido a cuestiones fiscales.

Casi de inmediato, los residentes de esa población empezaron a preocuparse acerca de la legalidad de esa medida, tomando en cuenta el acuerdo que el presidente firmó hace décadas con esa población.

El portavoz de la Casa Blanca rechazó comentar sobre la queja de Stambaugh, que fue reportada anteriormente por The Washington Post, y el alcalde de Palm Beach y la portavoz de la Organización Trump tampoco respondieron los correos electrónicos que les enviaron para que opinaran sobre el asunto.

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