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Estados Unidos
martes, 26 septiembre 2023 | 22:42
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Los Ángeles.- Pocos lugares en Estados Unidos son menos hospitalarios para Donald Trump que California, en donde perdió más de 5 millones de votos en la elección del 2020.
Sin embargo, ahora que el expresidente busca regresar a la Casa Blanca, el bastión liberal podría darle un improbable impulso.
Una regla estatal del Partido Republicano ha abierto la posibilidad de que Trump pueda arrasar con cada uno de los 169 delegados del estado el 5 de marzo, cuando California sea uno de más de una docena de estados que participarán en las competencias llamadas Súper Martes.
Debido a que Trump supera a sus rivales en muchos sondeos estatales y nacionales, una dominante actuación de California podría colocarlo mucho más cerca de una nominación republicana.
“Esta competencia se está consolidando rápidamente”, comentó Charles Morán, recaudador de fondos del Partido Republicano, un delegado de Trump en el 2016 y 2020. Con una victoria en California, agregó “Creo con toda certeza que Trump podría llevarse la nominación el Súper Martes y todo concluiría”.
A menos de cuatro meses antes de que las reuniones electorales de Iowa inicien oficialmente el proceso de nominación del Partido Republicano, la dinámica de la competencia podría cambiar.
Aunque Trump sigue vigilando de cerca al estado, en donde sus rivales republicanos más prominentes se reunirán sin él este miércoles para el segundo debate presidencial.
Aunque Trump no asistirá al evento, se asegurará de estar en California este viernes para asistir a la convención estatal del Partido Republicano, en donde muchas de las personas que serán delegados estarán entre los asistentes.
En lo que sería un giro irónico, el estado en donde el expresidente es ampliamente detestado fuera de su base conservadora, podría ayudarlo a afianzar el dominio de la nominación republicana a la Casa Blanca.
Trump, quien está enfrentando cargos penales en cuatro casos diferentes, desde hace tiempo ha tenido una relación conflictiva con California, el estado más poblado del país, en donde los demócratas no han perdido una elección estatal desde el 2006 y superan a los republicanos registrados por 2 a 1.
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