Alejándose de Trump, Mike Pence sienta las bases para elecciones del 2024

Washington.- Durante meses, el exvicepresidente Mike Pence se ha estado alejando de su alianza de conveniencia con el expresidente Donald J. Trump.

Después de cuatro años de servicio que rayan en la sumisión, Pence, cada vez más envalentonado, busca volver a presentarse a los votantes republicanos antes de una posible candidatura presidencial al diferenciarse de lo que muchos en el Partido Republicano como los peores impulsos del señor Trump. Está entre un pequeño grupo de su partido que está considerando postularse en 2024 sin importar lo que decida Trump.

Pence primero usó discursos de alto perfil para criticar la campaña del expresidente para anular los resultados de las elecciones de 2020, afirmando rotundamente que Trump estaba "equivocado" en su afirmación de que Pence podría haber bloqueado la ratificación del Colegio Electoral el 6 de enero de 2021. Luego, Pence visitó sin sutilezas el monumento en memoria de Heather Heyer, en Charlottesville, Virginia, quien murió en el motín de supremacistas blancos de 2017 que Trump trató de racionalizar culpando a “ambos lados”.

Ahora, este lunes, en las afueras de Atlanta, Pence está dando su paso más audaz e inequívoco para confrontar a su antiguo patrocinador político. En vísperas de las primarias de Georgia, el exvicepresidente se enfrentará al gobernador Brian Kemp, quizás el objetivo principal de la campaña de venganza de Trump de 2022 contra los republicanos que no se doblegaron ante sus mentiras electorales.

Pence se acercó a Kemp durante la pandemia y la campaña de 2020, y ahora se está alineando contra el candidato elegido por Trump, el exsenador David Perdue. Pero más que eso, Pence está tratando de reclamar una parte del crédito en lo que se espera sea el repudio más severo hasta el momento del intento de Trump de consolidar el poder, y se espera que Kemp prevalezca.

Es una ruptura enfática entre los antiguos compañeros de fórmula, que no han hablado durante casi un año pero que tampoco han librado públicamente una guerra de poder hasta ahora. Pence, dicen sus asistentes, sabe muy bien lo que representa ir a Georgia y el simbolismo solo se mantendrá sin que él se dirija a Trump o incluso a Perdue en sus comentarios.

En una declaración previa a la visita de Pence a Georgia, Trump menospreció a su vicepresidente a través de un portavoz.

“Mike Pence estaba destinado a perder la carrera de gobernador en 2016 antes de que lo detuvieran y su carrera política se salvara”, dijo Taylor Budowich, el vocero.  “Ahora, desesperado por perseguir su relevancia perdida, Pence se lanza en paracaídas a las carreras, con la esperanza de que alguien esté prestando atención. La realidad es que el presidente Trump ya tiene 82 a 3 con sus respaldos, y no hay nada que le impida salvar a Estados Unidos en 2022 y más allá”.