Al triple, producción de armas de fuego en EU

Nueva York.— Estados Unidos se encuentra en medio de un gran auge en la compra de armas que no muestra signos de disminuir, ya que la cantidad anual de armas de fuego fabricadas casi se ha triplicado desde el año 2000 y ha aumentado considerablemente en los últimos tres años, según el primer informe federal integral sobre el recuento del comercio de armas en dos décadas.

El informe, publicado por la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) el martes, tres días después de un tiroteo masivo en Buffalo, Nueva York, que dejó 10 muertos, pintó un vívido retrato estadístico de una nación que se arma hasta los dientes. Los compradores aprovecharon la flexibilización de las restricciones de armas por parte de la Corte Suprema, el Congreso y las legislaturas estatales controladas por los republicanos.

Los datos documentaron un cambio drástico en la demanda de los consumidores entre los propietarios de armas que tuvo profundas implicaciones comerciales, culturales y políticas: a partir de 2009, las pistolas semiautomáticas tipo Glock, compradas para protección personal, comenzaron a venderse más que los rifles, que normalmente se han utilizado en caza.

Incrustado en el documento de 306 páginas había otra estadística que los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley encuentran especialmente preocupante. La policía recuperó 19 mil 344 armas de fuego de fabricación privada, armas caseras imposibles de rastrear conocidas como “armas fantasma”, en 2021, un aumento diez veces mayor que en 2016.

Las cifras publicadas el martes revelaron una industria en aumento, con un incremento de la producción nacional anual de armas de 3.9 millones en 2000 a 11.3 millones en 2020. Un porcentaje relativamente pequeño de armas producidas en el país se exporta al extranjero.

Actualmente, hay alrededor de 400 millones de armas en los Estados Unidos, según una encuesta de 2018 realizada por Small Arms Survey, una organización no partidista.

Las estadísticas, seleccionadas por la división de investigación de ATF de expertos de la industria, académicos y gubernamentales, ofrecieron pocas sorpresas importantes. Sin embargo, la publicación del informe representa una victoria significativa para los defensores del control de armas.

Si bien los demócratas han fracasado en su agenda más amplia de limitar el acceso fácil a las armas de fuego, están logrando retirar gradualmente una cortina negra informativa que ha oscurecido los datos sobre el comercio de armas. Hace un año, el presidente Joe Biden ordenó a la ATF que recopilara y analizara 20 años de datos sobre armas.