Acusan violencia contra migrantes en gestión de Biden

Ciudad de México— En lo que va de la Administración del presidente Joe Biden, al menos 3 mil 250 migrantes que estaban varados en el norte de México por la política migratoria de Estados Unidos fueron víctimas de secuestros, violaciones, tráfico de personas y otros delitos, según Human Rights First (HRF).

La organización basada en Nueva York emitió una actualización de sus reportes, en la cual critica a la gestión de Biden, que inició el pasado 20 de enero, por continuar con las expulsiones exprés que inició su antecesor Donald Trump.

"Al 17 de junio de 2021, Human Rights First ha rastreado 3 mil 250 secuestros y otros ataques, incluida la violación, la trata de personas y asaltos armados violentos, contra solicitantes de asilo y migrantes expulsados o bloqueados en la frontera entre Estados Unidos y México desde que el presidente Biden asumió el cargo en enero", advirtió HRF.

"Este recuento incluye incidentes publicados en los medios, entrevistas de solicitantes de asilo por Human Rights First, información de abogados y proveedores de servicios humanitarios en la frontera, así como más de 2 mil 700 incidentes reportados de ataques violentos contra migrantes y solicitantes de asilo varados en México que fueron recibidos a través de una encuesta electrónica en curso realizada por la organización Al Otro Lado y revisada por Human Rights First".

El reporte recuerda que Trump inició las expulsiones de migrantes hacia México bajo el llamado Título 42, invocado como una medida para evitar la propagación de la Covid-19.

En su visita a México, Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, aseguró que el Título 42 continuará aplicándose, enviando a los migrantes de terceros países hacia México.

"La Administración Biden parece continuar con esta política ilegal como una herramienta de política migratoria, para intentar disuadir a los refugiados de buscar el asilo que les salve la vida en Estados Unidos", planteó HRF.

En abril, la misma organización reportó solo unos 500 casos de violencia contra migrantes en territorio mexicano.