Acuden estadounidenses a votar en masa ante indicios de fuerza republicana

Washington.- Estadounidenses ansiosos y polarizados han invadido los lugares de votación anticipada y devuelto las boletas por correo en masa, emitiendo más de 32 millones de votos hasta el pasado jueves, ya que la participación en la mayoría de los estados mantiene el ritmo de los niveles récord de las elecciones de mitad de período de 2018 y los votantes enfrentan tensiones aumentadas sobre el proceso democrático.

La alta energía antes del día de las elecciones, si bien ofrece indicios de esperanza para ambos partidos mientras buscan obtener signos de fortaleza o debilidad, refleja cómo los comportamientos electorales de la nación han entrado en un terreno desconocido desde la pandemia y el caos alimentado por Trump de las elecciones de 2020.

Muchos más estadounidenses ahora votan anticipadamente o por correo, y muchos más republicanos ahora evitan las boletas por correo y votan en persona, tendencias que han alterado los modelos de votación tradicionales y han llevado a los expertos electorales y operadores políticos a advertir contra interpretar demasiado en los totales de votación anticipada de este año.

Aun así, todos están investigando con entusiasmo los números.

A los republicanos les está yendo mejor en gran medida en todo el país, con un total de votos anticipados por encima de sus niveles de 2020 en estados como Nevada y Florida, así como en estados muy demócratas como California. Pero en los estados con carreras importantes para el Senado y la gobernación, como Pensilvania y Arizona, el recuento de votos anticipados de los demócratas también está al mismo nivel o más alto que hace dos años.

La imagen emergente, que está incompleta, porque menos de la mitad de todos los estados informan los totales de votos por registro de partido, es de una elección de mitad de período con un alto interés general, un amplio entusiasmo republicano y una intensidad demócrata algo más estrecha hasta el momento. Los signos de una ventaja republicana se alinean con las encuestas que muestran que el partido tiene una base más sólida en los últimos días de la campaña, con una reacción históricamente típica a un presidente impopular en su primer mandato y la inquietud generalizada de los votantes por cuestiones económicas.