Abuso policial no cesa en EU tras año y medio de la muerte de Floyd

Nueva York.- Por segunda vez este año, un jurado en Minneapolis falló en contra de un exoficial de policía por matar a un hombre afroamericano.

Al igual que la condena de Derek Chauvin por el asesinato de George Floyd, el veredicto de este jueves contra Kimberly Potter por dos cargos de homicidio por la muerte a tiros de Daunte Wright durante una parada de tráfico, representó una decisión inusual de enviar a un oficial de policía a prisión.

Y, sin embargo, a pesar de las dos condenas de alto perfil en Minneapolis, una revisión de los datos un año y medio después del verano de protestas en Estados Unidos muestra que la responsabilidad de los oficiales que matan sigue siendo difícil de alcanzar, y que la gran cantidad de personas muertas en encuentros con la policía se mantuvo estable a un nivel alarmante.

El asesinato Floyd en la esquina de una calle de Minneapolis atrajo a millones a las calles en protesta y desencadenó una reevaluación nacional de la raza que tocó casi todos los aspectos de la vida estadounidense, desde las salas de juntas corporativas hasta los apodos deportivos. Pero en los temas centrales que desencadenaron el malestar social en primer lugar, la violencia policial y la rendición de cuentas, muy poco ha cambiado.

Desde la muerte de Floyd en mayo del año pasado, la policía ha matado a 1 mil 646 personas, o alrededor de tres personas por día en promedio, según Mapping Police Violence, una organización sin fines de lucro que rastrea a las personas asesinadas por la policía. Aunque los cargos por homicidio u homicidio involuntario contra los agentes han aumentado este año, los cargos penales, y mucho menos las condenas, siguen siendo excepcionalmente raros.

Esto subraya tanto el beneficio de la duda que generalmente se otorga a los agentes de la ley que a menudo toman decisiones de vida o muerte en una fracción de segundo, como la forma en que la ley y el poder de los sindicatos policiales a menudo protegen a los agentes, dicen activistas y expertos legales.