A casi dos meses Trump aún no acepta resultados de elecciones

Washington— El día después de que el presidente Trump, a fines de septiembre, se negó a comprometerse con una transición pacífica del poder, los republicanos del Congreso se apresuraron a tranquilizar a la nación.

"El ganador de las elecciones del 3 de noviembre será investido el 20 de enero", tuiteó en ese momento el líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell.

“Permítanme ser muy claro para ustedes: será pacífico”, dijo el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy.

"Si los republicanos pierden, aceptaremos ese resultado", dijo la senadora Lindsey O. Graham a Fox News. “Si la Corte Suprema falla a favor de Joe Biden, aceptaré ese resultado".

"Creo que el presidente aceptará el resultado, pero debes asegurarte de que sea justo", dijo el senador Thom Tillis.

Desde entonces, Trump y la gran mayoría de los republicanos del Congreso aún no han aceptado públicamente los resultados de las elecciones presidenciales casi dos meses después de que se fallara a favor de Joe Biden.

El Partido Republicano continúa negándose a aceptar los resultados de las elecciones incluso cuando las investigaciones estatales y federales han encontrado poco o ningún fraude electoral y Trump ha perdido 59 de 60 demandas electorales presentadas por su campaña y aliados políticos, incluidas dos presentadas en la Corte Suprema de los Estados Unidos.

Entre las aproximadamente tres docenas de republicanos del Congreso que han reconocido públicamente la victoria de Biden, muchos esperaron días o semanas después de que se fallara la elección. Fue una clara desviación de las felicitaciones públicas que muchos de esos mismos republicanos le dieron al entonces presidente electo Trump en las horas y días posteriores de las elecciones de 2016.

Que tantos republicanos electos todavía se nieguen a aceptar el resultado de las elecciones tal vez no sea sorprendente, dada la cantidad de partidarios de Trump que piensan falsamente que Biden no ganó legítimamente las elecciones.

McConnell y Tillis finalmente reconocieron la victoria de Biden, semanas después de que se fallara la elección.

Pero todavía están en minoría. El 4 de noviembre, el día después de las elecciones, McCarthy dijo a los periodistas que aceptaría los resultados de las elecciones una vez que fueran certificados por los estados que aún estaban contando votos. El último de los seis estados decisivos clave certificó la victoria de Biden el 30 de noviembre.

McCarthy aún tiene que aceptar esos resultados. Se encuentra entre los más de 200 republicanos del Congreso que aún no han reconocido públicamente la victoria de Biden, incluso después de que el colegio electoral selló la victoria de Biden en su reunión del 14 de diciembre. En cambio, casi dos tercios de ellos firmaron una demanda pidiendo a la Corte Suprema que esencialmente anulara la victoria de Biden (La Corte Suprema dijo que no).