Sin aclarar, patrimonio de mando atacado en auto de lujo

Chihuahua— A pesar de que aún no se ha aclarado el origen del patrimonio de Hugo Zavaleta Aparicio, comandante de la Policía Estatal en la zona de Gómez Farías, quien fue víctima de un ataque en la capital del estado mientras conducía su vehículo Mini Cooper 2016, el oficial se reincorporó a sus actividades desde la semana pasada, pues las lesiones que presentó resultaron mínimas. Dicho automóvil permanece en los patios del Complejo Estatal de Seguridad (CES), pues se encuentra como evidencia policial del ataque que sufrió junto con su escolta el pasado 23 de octubre. 

El jefe de la Policía Estatal, Óscar Alberto Aparicio Avendaño, refirió que el comandante Zavaleta Aparicio ya se encuentran al frente del Mando Único en la Zona Noroeste de la entidad, así como el escolta que lo acompañaba durante el ataque que sufrieron.

Sin embargo, aún no se ha establecido cómo es que el oficial Zavalera Aparicio tenía bajo su propiedad el autómovil de lujo cuyo costo ronda los 350 mil pesos y que para adquirirlo otorgó un domicilio falso en la ciudad de Culiacán que corresponde a una purificadora de agua.

Cabe señalar que el automóvil porta placas de circulación del Estado de Sinaloa, mismas que presentan un adeudo superior a los 23 mil pesos, la matrícula es VSC 3339, sin embargo, luego de los hechos, el jefe de la Policía Estatal Aparicio Avendaño expresó que, lo más importante era el esclarecimiento de los hechos y la captura de los responsables.

El fiscal César Augusto Peniche Espejel, informó que se iniciaría una investigación interna para establecer la forma en la que el agente estatal había adquirido este vehículo; hasta el momento se no se ha brindado información al respecto. 

A finales del mes de octubre la Fiscalía General del Estado (FGE), anunció la detención de seis personas –cuatro hombres y dos mujeres– a quienes identificó como sicarios y posibles responsables de haber participado en el ataque a los agentes de la Policía Estatal, sin embargo, fueron vinculados a proceso únicamente por la portación de armas y droga y no se estableció su relación con ese hecho.