'No dejemos que nos roben la tranquilidad', víctima de secuestro

Delicias— Luego de haber sufrido un intento de secuestro en Delicias, el empresario Carlos Cuevas Abundis, hizo un llamado en redes sociales a la ciudadanía para “no dejar que nos roben la tranquilidad”, y a la vez que lamentó la muerte de su escolta. “Yo hago un exhorto a la ciudadanía deliciense a extremar precauciones y no permitir que nos roben la tranquilidad con la que contamos los delicienses siendo la cd (sic) más tranquila del estado, resultado de las personas que velan por la seguridad de todos”, escribió en sus redes sociales. También resaltó la valentía de su cuerpo de seguridad que logró la huida de quienes intentaron secuestrarlo, que a la postre resultó ser un comando armado de Gómez Palacio, Durango.

Cuevas Abundis refirió en que “ese día le tocó a él, mañana quién sabe”; también hizo un exhorto a no dejarse influenciar por mitos y leyendas urbanas que surgen a raíz de hechos como el que vivió, agradeciendo las muestras de afecto recibidas luego del suceso. 

Tiempo después de haber hecho la primera publicación, expresó su agradecimiento a los tres niveles de gobierno, al que llamó glorioso Ejército Mexicano y a “mi querida” Cruz Roja, quienes se encuentran dispuestos a ayudar a quienes más lo necesitan. 

Cabe destacar que al momento del atentado fallecieron un delincuente y el escolta Josué Adrián Hernández Torres; además resultó herido el médico Roberto Ruvalcaba, quien se encontraba desayunando en el lugar y que fue trasladado a un hospital privado en la capital del estado. 

Clausuran restaurante y aseguran 2 armas 

El restaurante Celebridades fue clausurado ayer por las autoridades municipales, en tanto dos armas de fuego, una R-15 y otra de 9 milímetros que supuestamente usó el delincuente abatido fueron aseguradas, además de un video que es analizado para determinar las diversas líneas de investigación que apuntan a ser un atentado. 

La Fiscalía General del Estado confirmó que trabajan elementos de las agencias estatales de investigación, en la recopilación de información y evidencia que pueda dar vista para dar con los atacantes. Se analizan varias líneas de investigación posibles una de ellas podría ser que se trató de un atentado y no un intento de secuestro, como se indicó en un principio, por la manera en la que se abrió fuego. 

En el exterior del local se encontraba un cuerpo sin vida de un masculino, el cual presentaba en el cuerpo múltiples impactos de bala y de acuerdo a las primeras indagatorias respondía al nombre de Josué Adrián Torres Hernández, quien se desempeñaba como guardaespaldas. 

Mientras que en el interior del restaurante se localizó otro masculino sin vida de entre 30 a 40 años, tendido en el piso cerca de los sanitarios, también presentaba varios impactos de proyectil de arma de fuego y se desconoce su identidad.