Karely crece sin su madre; Yeni desapareció hace tres años

Chihuahua.- Karely tenía escasos dos meses de nacida cuando su madre Yeni Cruz Torres la dejó al cuidado de su abuela, para poder acudir por cuestiones de trabajo a la calle Libertad el lunes 29 de agosto del 2016. Su rastro se perdió ese día y en esa zona del centro de la ciudad que ha sido escenario de otras desapariciones de jovencitas que hasta hoy permanecen sin ser localizadas.

Ahora Karely tiene tres años y un cúmulo de fotografías que su abuela, Irazema Torres Ie muestra al tiempo que le dice: “mira, ella es tu mamá”.

Una de esas fotografías, tomada semanas antes de la desaparición, muestra la imagen de Yeni recostada al lado de la pequeña que duerme plácidamente.

Sí, ya pasaron años, demasiados meses y numerosos días ,  pero la familia, y de manera particular su madre tiene la fe puesta en que alguna vez Yeni regresará a casa para abrazar a la bebé que tanto la necesita.

Según las declaraciones Irazema que ha brindado a lo largo de estos 36 meses de angustia, la última vez que vio a su hija fue un lunes poco antes de la una de la tarde. 

La jovencita, de entonces 17 años, estaba entusiasmada porque había sido aceptada para trabajar como dependiente en una zapatería de la calle Libertad. 

Salió de casa dejando a su bebé al cuidado de su familia a su bebé y con la promesa de regresar pronto.

No tenía mayores intenciones que ir al centro para recoger los uniformes con los que comenzaría el nuevo empleo. Era un trabajo que le permitiría darle una mejor calidad de vida a su niña.

Sobre las dos de la tarde llegó a la zapatería. Uno de los empleados del lugar cuenta que Yeni ingresó al local, vestía pantalón de mezclilla, blusa blanca y zapatos oscuros.

Preguntó por el gerente, pero no se encontraba, así que el empleado le sugirió que regresara más tarde y ella dijo que lo haría pero no regresó.

A partir de ahí, ni un solo rastro. 

No sólo Yeni, también otras jovencitas han sido reportadas como desaparecidas “cuando se dirigían al centro”. Los casos más recordados tienen que ver con las desapariciones ocurridas en el 2001, entre ellas la de Julieta Marlen González de 17 años, Minerva Teresa Torres, de 18 y Rosalba Pizarro, de 16,  los restos de esta última hallados en el 2004, en un camino vecinal de Santa Eulalia.

De Julieta, Minerva y de Yeni, hasta ahora nada se sabe.

En septiembre del 2016, ante la Cruz de Clavos ubicada frente a Palacio de Gobierno, Irazema Torres acompañada por la asociación Justicia por Nuestras Hijas, ofreció una rieda de prensa en la que suplicó “Si alguien tiene a mi hija, que la deje, que nos la entregue, su bebé la necesita”.

Ese día la familia dejo en claro que para Yeni – hoy de 19 años -  su hija era muy importante y que no existían razones para que por voluntad hubiese decidido marcharse.

En una entrevista concedida un año más tarde, Irazema narró la tristeza de ver crecer a su nieta sin el cariño de su mamá.

“le mostramos fotografías, y ya la reconoce” dijo.

A pesar de que han trascurrido tres años, la familia mantiene activa una página en la red social de Facebook, “buscando a Yeni”, donde continúan pidiendo la colaboración de la ciudadanía para obtener cualquier pista que permita dar con su paradero.

“Si es que alguien la tiene si alguien sabe, o vio algo, pon tu mano en su corazón para que se apiade de la angustia de su familia. Sí es que Yeni se fue por su voluntad como algunos piensan. Yo creo que no fue así porque la conocía, pero si es así que alguna de estas publicaciones la hagan reflexionar y que decida volver su bebe más que nadie la necesita”, se lee en una de ellas.