En 5 años, más de 11 mil 750 homicidios

En el último mes de su quinquenio, la administración de Javier Corral acumuló 223 víctimas de asesinato doloso en el estado, de acuerdo con datos oficiales y el seguimiento periodístico de este medio.

Con esta cantidad, el presente gobierno suma mil 734 crímenes contra la vida en lo que va del año y 11 mil 758 desde su inicio en octubre de 2016, cifra esta última que rebasa los 11 mil 743 homicidios registrados en un período similar –de octubre de 2010 a agosto de 2015– del gobierno de César Duarte.

“La descomposición de los grupos criminales se traduce en el surgimiento de nuevas células delictivas. También, la disputa territorial que a nivel nacional se está llevando con la presencia de cárteles que no habían entrado a esta disputa”, dijo ayer Manuel del Castillo, coordinador de Comunicación Social del actual Gobierno del Estado, consultado sobre los datos.

“La presencia de la FGR (Fiscalía General de la República) en el combate a la delincuencia organizada no ha sido suficiente”, agregó el funcionario.

El fiscal general del estado, César Augusto Peniche Espejel, no respondió ayer una solicitud de información sobre la estadística ni sobre el hecho de que se rebasaran las muertes presentadas en el mismo período del sexenio anterior.

La cantidad registrada en agosto –con 221 casos, hasta el día 30– fue proporcionada por la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), cuyo titular, Emilio García Ruiz, sólo manifestó considerar que la violencia “se mantuvo” con respecto a la administración anterior. Otros dos crímenes fueron reportados ayer por este medio.

“Hemos visto con gran preocupación que, en los últimos cinco años, los homicidios dolosos se han incrementado de forma considerable, llegando a máximos parecidos a los que se presentaron a mediados del 2011 (...) Recordemos que, a finales del 2015, se registró el menor número de homicidios, con 17 en un mes (en Ciudad Juárez)”, dijo ayer Diana Chavarri, directora en la Zona Norte del Fideicomiso para la Competitividad y Seguridad Ciudadana (Ficosec).

Consultada por este medio sobre las cifras de la actual administración, Chavarri agregó que, en el caso de Juárez –que representa más de la mitad de los crímenes de 2021 en el estado– las autoridades afirman que el 90 por ciento de los homicidios dolosos está relacionado con el narcomenudeo, delito que, planteó, debería combatirse con coordinación y trabajo de inteligencia para permitir la judicialización de casos.

“Sin embargo, los resultados demuestran que hay fuertes debilidades en esas estrategias, las cuales podrían ser atribuibles a la falta de confianza entre instituciones policiales, presupuestos y personal insuficiente, así como la poca capacidad de la Fiscalía General de la República para la persecución de delitos de orden federal, como es la delincuencia organizada”, dijo Chavarri.

La cifra de agosto en el estado es un 11 por ciento menor a los 250 crímenes contra la vida registrados en julio pasado y 22 por ciento menor a los 285 presentados en agosto de 2020, que fue el mes más violento de esta administración.

A diferencia de este descenso, la estadística muestra que, en los cinco años previos, la violencia fue en aumento constante desde 2016, al pasar de mil 470 víctimas ese año a dos mil 12 en el siguiente, a dos mil 244 en 2018, dos mil 585 en 2019 y dos mil 715 en 2020.

En el sexenio anterior, en contraste, la violencia fue bajando, con cinco mil 391 casos en 2010 –el más violento hasta la fecha–, cuatro mil 31 en 2011, dos mil 540 en 2012, mil 706 en 2013, mil 292 en 2014 y mil 151 en 2015.

“La cifra de homicidios a lo largo de este 2021, afortunadamente, ha ido ligeramente a la baja; esto significa que, aunque ha sido marginal el descenso en el número de homicidios, pues ha ido descendiendo”, dijo el lunes pasado Peniche, entrevistado por este medio en la inauguración del edificio de la Fiscalía Especializada de la Mujer (FEM).

“Eso no nos puede de ninguna manera dejar satisfechos; siguen siendo muchos homicidios los que se han presentado, pero el esfuerzo que han hecho las autoridades de los tres niveles de gobierno ha mostrado que es posible cuando menos contener el crecimiento en el número de homicidios”, agregó el fiscal, que insistió en que las causas de la violencia, en el caso de Juárez, son la delincuencia organizada, el narcomenudeo y los altos niveles de consumo de sustancias ilícitas. 

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