Diario
El Paso
jueves, 25 abril 2019 | 06:00
A menos de una semana de su arresto Larry Mitchell Hopkins, líder del grupo United Constitutional Patriots terminó en el hospital tras ser golpeado por otros reos al interior del Centro de Detenciones del Condado de Doña Ana.
El ataque contra Hopkins se registró el pasado lunes alrededor de las 9 de la noche, confirmaron autoridades del Centro de Detenciones.
No se dieron detalles sobre cómo comenzó el ataque, ni entre cuántas personas golpearon al hombre, ya que el caso se encuentra bajo investigación.
Kelly O’Connell, abogado de Hopkins, confirmó a El Diario de El Paso que su cliente presenta bastante dolor debido a la golpiza que recibió, por lo que exige una investigación sobre lo ocurrido.
“El señor Hopkins tuvo que ser hospitalizado luego de que lo atacaran y le quebraran las costillas”, dijo el abogado.
O’Connell considera una irresponsabilidad que hayan puesto a su cliente junto con la población general, sabiendo las cosas que se han dicho sobre él en los medios de comunicación.
“En verdad no entiendo porque lo pusieron ahí, sobre todo sabiendo que gran parte de la población de presos es de origen hispano”, enfatizó.
Esto debido a que Hopkins y su grupo compuesto por veteranos del Ejército de Estados Unidos, llegaron a la frontera Anapra/Sunland Park a finales de febrero y montaron un campamento para hacer “tareas de vigilancia” y respaldar el trabajo de la Patrulla Fronteriza (USBP).
El Diario de El Paso fue uno de los primeros medios locales en hacer una entrevista a al grupo a principios del mes de marzo y Hopkins relató que vigilarían la frontera para evitar que migrantes indocumentados ingresaran al país.
Aunque Hopkins aseguró que ellos solo darían aviso a los agentes de USBP cuando los migrantes trataran cruzar ilegalmente, miembros de su grupo comenzaron a subir videos y fotografías a redes sociales realizando supuestas detenciones.
En las imágenes se aprecia a distintos integrantes del grupo patrullando la frontera mientras vestían uniformes tácticos y portaban rifles de asalto.
Dichos videos desataron polémica entre la población y organizaciones promigrantes, quienes aseguraban que los integrantes de United Constitutional Patriots estaban incurriendo en el delito de secuestro. Ya que al tratarse de un grupo civil, no tenían facultades para detener a ninguna persona.
Hopkins, de 69 años, fue detenido el pasado 19 de abril por agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) en el campamento que su grupo tenía en Sunland Park, Nuevo México.
La detención Hopkins fue por cargos interpuestos por el FBI en 2017 por posesión de armas y municiones por un convicto, luego de que se encontraran en su casa nueve armas de fuego y municiones; No por lo que estaba ocurriendo con los migrantes en la frontera.
De acuerdo con información proporcionada por el Departamento de Justicia, Hopkins quien es originario de Flora Vista, Nuevo México ha sido arrestado en tres ocasiones por lo que no podía tener armas de fuego.
‘¿… a salvo?’
O’Connell acudió ayer miércoles a las instalaciones de la prisión para averiguar los detalles del ataque contra su cliente también conocido como John Horton Jr. y para conocer su estado de salud.
“Hoy (miércoles) fue regresado al Centro de Detenciones (del Condado de Doña Ana) y está muy desmoralizado por lo que pasó”, mencionó O’Connell.
El abogado agregó que envió una carta a Vince Podluk, Administrador de la prisión para solicitar el aislamiento de su cliente por su seguridad.
“En Estados Unidos tenemos la reputación de evitar que los presos sean dañados, sin importar de que se les acusa. Por eso le pregunto ¿cómo planea usted mantener a mi cliente a salvo? Obviamente el aislamiento es la mejor opción”, se leía en el documento.
La próxima audiencia de Hopkins está programada para el 29 de abril, cuanto solicitará a un juez federal salir bajo fianza y poder llevar su proceso en libertad.