¡Qué calor! Se adelantan temperaturas de 100 grados

El lunes, a la 3:08 pm, la estación meteorológica del Aeropuerto Internacional de El Paso registró 101 grados Fahrenheit (38.3 centígrados), un nuevo récord para el 16 de mayo, superando el máximo anterior el mismo día hace cuatro años, cuando en 2018 alcanzó 98 grados (36.7 centígrados).

El clima temprano de tres dígitos se ajusta a un patrón de temperaturas más cálidas en El Paso causadas por el cambio climático.

El cambio climático está impactando a El Paso y en general al Suroeste de Estados Unidos de una manera cada vez más cálida.

Este lunes se registró de manera oficial el primer día del año con una temperatura superior a los 100 grados Fahrenheit (37.8 centígrados) en la región Paso del Norte, rompiendo el récord histórico.

Minutos antes, a las 2:59 pm se habían alcanzado los 100 Fahrenheit.

A partir de 1887, cuando comenzó a registrarse la temperatura en El Paso, en promedio el primer día en que se presentan a nivel local temperaturas de tres dígitos es el 13 de junio.

Los récords históricos señalan que el día más caliente en la primavera ha sido el 7 de mayo de 2020, con 100 grados Fahrenheit.

Un reporte meteorológico de 2021 señala que para el año 2036 el número de días con 100 grados o más en Texas se duplicará, comparados con el período comprendido entre 2001 y 2020.

El calentamiento global, impulsado por la quema de combustibles fósiles, ha estado calentando y secando el Oeste americano durante años. Ahora la región se está asando bajo una combinación de una sequía que es la peor en dos décadas y una ola de calor sin precedentes.

“El Suroeste está siendo golpeado por el cambio climático con más fuerza que casi cualquier otra parte del país, aparte quizás de las ciudades costeras”, dijo Jonathan Overpeck, científico climático de la Universidad de Michigan. “Y por más malo que parezca hoy, esto es lo mejor que puede llegar a ser si no controlamos el calentamiento global”.

Dado que se espera que las temperaturas aumenten a medida que las naciones luchan por controlar sus emisiones que calientan el planeta, el Oeste de los Estados Unidos deberá mantener medidas difíciles y costosas para adaptarse. Eso incluye el rediseño de las ciudades para hacer frente al castigo por el calor, la conservación del agua y la ingeniería de redes que no fallen durante condiciones climáticas extremas.