Diario
El Paso
lunes, 11 mayo 2020 | 06:00
El riesgo de contagio de Covid-19 entre elementos de la Patrulla Fronteriza ha orillado a que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de los Estados Unidos establezca nuevas medidas de protección y procesamiento de detenidos en las actividades de campo de la agencia federal.
Un memorando interno instruyó a los agentes sobre la necesidad de utilizar equipo adicional de protección personal, como es el uso de máscaras N95 mientras estén en servicio, detalla el documento oficial que fue girado el pasado viernes.
De acuerdo a la indicación, y según el servicio que presenta cada elemento, es necesaria “la utilización adicional de Equipo de Protección Personal como guantes de nitrilo, trajes impermeables o batas, y protección para los ojos que deben usarse de acuerdo a cada situación”, dicta el documento.
A la par se han diseñado medidas en el procesamiento de personal que apuntan a reducir el contacto con migrantes que pudieran ser asintomáticos, pero portadores del Covid-19.
Hay un total de 334 empleados de CBP que han sido contagiados por el Covid-19, y se han registrado 3 fallecimientos de acuerdo a cifras oficiales de la agencia federal.
Mientras la tercera parte de los contagios se han dado en empleados de CBP en Nueva York con 103 casos, en los estados fronterizos con México la situación es preocupante por las cifras en dichas entidades.
En California se han detectado 58 casos, mientras que en Arizona son 6, Nuevo México con 3 y Texas con 28.
Estas cifras de contagios en las filas de CBP buscan minimizarse al instruir el uso de la máscara N95, exclusiva para el uso de personal médico y de la primera línea de servicios de emergencia, y ahora de los elementos encargados de vigilar las fronteras.
El memorando en cuestión permite que el personal de la Patrulla Fronteriza, en operaciones consideradas de riesgo bajo a medio, utilice máscaras quirúrgicas en lugar de máscaras N95.
“Los agentes con vello facial, como lo permite la negociación de contrato colectivo, deben afeitarse si el vello facial interfiere con un sellado adecuado de las N95”, especifica la orden.
Asimismo se enlistan algunas exenciones médicas y religiosas, que quedan a consideración de cada caso y a través de la cadena de mando.
De tal forma es obligatorio que “los agentes usen el Equipo de Protección Personal (PPE) provisto por la Patrulla Fronteriza.
Es por ello que se han prohibido opciones alternativas para proteger la cara de los agentes, como es el caso de máscaras hechas en casa y pañuelos tipo bandana, que no ofrecen una protección real como la que proporcionan las mascarillas quirúrgicas.
Procesamiento y distanciamiento
De acuerdo a Mark Morgan, comisionado de CBP, de la cual depende la Patrulla Fronteriza, la detección del primer caso de Covid-19 en un migrante detenido llevó a la dependencia a modificar la forma en que se procesa a los detenidos.
“Comparemos lo que pudo suceder el 23 de abril, cuando tuvimos a nuestro primer migrante positivo con Covid-19 bajo custodia”, señaló Mark Morgan, al presentar las cifras probables de contacto del portador con agentes y otros detenidos.
En el supuesto caso de exposición, un migrante que no presentaba síntomas pudo exponer a 26 agentes de la Patrulla Fronteriza desde el momento en que 2 agentes lo detienen, otros 2 levantan reportes y 4 lo transportan; así 2 elementos más le realizarían una revisión médica y 18 agentes más lo podrían contactar dentro de un centro de procesamiento y detención.
En este mismo escenario un total de 426 migrantes detenidos y procesados podrían estar en contacto con el migrante asintomático, siendo el mayor número con posibles contagios en las instalaciones de una estación de la Patrulla Fronteriza, donde dicho individuo podría estar en contacto hasta con 397 migrantes.
La situación ha cambiado drásticamente cuando el migrante tiene síntomas de la enfermedad, donde los contactos son mínimos y se aísla al detenido del resto de la población.
En este panorama ningún otro migrante entra en contacto con el resto de los detenidos, mientras que dentro del personal de la Patrulla Fronteriza sólo 29 agentes tendrían contacto con un individuo contagiado, así como un miembro del equipo médico, mismos elementos que ahora deben de utilizar las nuevas medidas de protección que incluyen las mascarillas respiradoras N95.
“Debido a las políticas Covid-19, pudimos reducir el contacto con nuestra fuerza laboral y evitar el contacto con otros migrantes”, afirmó Morgan, basado en el nuevo esquema de trabajo y procesamiento.
rcarrillo@diariousa.com