Diario
El Paso
miércoles, 24 abril 2019 | 06:00
La controversia alrededor de Larry Mitchell Hopkins, líder del grupo “United Constitutional Patriots” continúa, ya que aparentemente tenía planes para asesinar a Barack Obama y Hillary Clinton.
Documentos en poder de El Diario de El Paso, señalan que el propio Hopkins admitió al propio Buró Federal de Investigaciones (FBI) sus planes contra el ex presidente y la ex candidata demócrata.
Pero ellos no eran los únicos en la mira de Hopkins y su grupo, ya que supuestamente también planeaban el homicidio del millonario George Soros, seguidor del partido demócrata.
Esto debido a que Obama, Clinton y Soros eran considerados como partidarios de “Antifa o Anti Fascists”.
Esta supuesta declaración, se dio en 2017 cuando el FBI acudió a la casa de Hopkins en Flora Vista, Nuevo México, luego de que vecinos reportaran la presencia de hombres altamente armados.
Según los documentos, la casa de Hopkins era utilizada como el Centro de Operaciones del grupo, conformado por veteranos del Ejército de Estados Unidos.
Cuando el FBI estuvo en su casa Hopkins, quien también se hace llamar John Horton Jr. les permitió hacer una inspección y los agentes encontraron nueve armas de fuego y municiones.
Lo cual era ilegal, debido a que Hopkins no podía poseer armas de fuego por tratarse de un ex convicto.
El hombre fue detenido tres veces entre 1996 y 2006 en los estados de Oregón y Michigan por posesión de un arma de fuego cargada, personificación de un oficial de policía y portación de arma de fuego por un convicto.
Hopkins, de 69 años, fue detenido el pasado 19 de abril, en el campamento que Hopkins y los miembros de su grupo montaron a unos metros de la valla fronteriza en Anapra/Sunland Park a finales de febrero.
Desde donde realizaban lo que ellos llamaban “detenciones ciudadanas” de migrantes, para luego entregarlos a la Patrulla Fronteriza (USBP).
En un supuesto intento de ayudar a USBP, durante la crisis migratoria que se vive en la frontera.
No fue arrestado
por el campamento
Kelly O’Connell, abogado de Hopkins aseguró que la detención de su cliente no fue por la polémica que desataron los videos, donde se ve a miembros de su grupo deteniendo migrantes.
“Estos son cargos de 2017, no tiene nada que ver con lo que pasa en el campamento, si fuera así lo habrían incluido en los cargos”, enfatizó.
Hopkins se encuentro recluido en el Centro de Detenciones del Condado de Doña Ana.
El hombre fue presentado ante un juez federal el pasado lunes y su próxima audiencia está programada para el 29 de abril.
En caso de ir a juicio y ser encontrado culpable, Hopkins podría pasar hasta 10 años en prisión.