Dan 75 años de prisión al asesino de Erika

El juez Sam Medrano fue enfático y directo al sentenciar a Ricardo Márquez a 75 años de prisión por el asesinato, en julio de 2019, de Érika Gaytán, cuyo cadáver no ha sido encontrado después de tres años de búsqueda por parte de sus familiares.

La sentencia se dictó después de que el tribunal escuchó dos días de declaraciones de impacto de testigos de carácter. El testimonio incluyó a la ex pareja romántica de Márquez, quien lo describió como celoso, posesivo y violento, así como el padre del hijo de Érika, quien conocía al asesino de su ex mujer y sabía los alcances de ira del ahora asesino convicto.

“Nunca podremos darle un cierre a la familia Gaytán porque no pudimos recuperar el cuerpo. Sabemos que eso fue muy importante para la familia, pero sentimos que esta sentencia les permitirá ponerle un cierre a este trágico momento en sus vidas y permitirles seguir adelante”, dijo la fiscal de Distrito Yvonne Rosales.

Rosales agregó que en este tipo de casos, donde no se encuentra un cuerpo, es muy difícil para los fiscales obtener una condena.

“Obtener una condena por un caso de asesinato sin haber recuperado un cuerpo es uno de los casos más difíciles que tendrá un fiscal en su carrera”, dijo.

La madre biológica de Gaytán, María de Lourdes Martínez, habló después de la sentencia y describió tener una variedad de emociones. Dicho esto, por un lado, está contenta con la sentencia, pero sabe que no le devolverá a su hija.

“Espero que algún día se encuentre lo que quede de mi hija para que podamos darle un entierro cristiano digno y su hijo pueda llevarle flores y verla... y eso es lo que quiero para toda la familia también”, dijo Martínez.

“Yo le diría que te extraño, que te necesito aquí conmigo, y quiero verla todos los días, y sé que es imposible. Eso es lo que le diría”, agregó la madre, que no pierde la esperanza de encontrar el cuerpo.

Guadalupe Gaytán, la madre adoptiva de Erika, dijo que continuarían buscando su cuerpo y preguntó si alguien podía ayudarlas para que finalmente pudieran tener paz.

Márquez fue acusado de matar a Gaytán en 2019 después de que los dos asistieran juntos a un concierto.

El cuerpo de Gaytán nunca fue encontrado, pese a repetidos esfuerzos de la Policía y de los parientes de la víctima.

Los investigadores encontraron rastros de la sangre de Gaytán en el Jeep del hermano de Márquez después de que éste lo pidiera prestado.

Los investigadores también descubrieron que Márquez tomó prestada una pala y el video de vigilancia lo mostró conduciendo hacia el área de Red Sands cerca de Montana en el Jeep después de tomar prestada la pala.

Los investigadores también encontraron “zapatos llenos de tierra” durante la investigación.

A Márquez se le fijó el juicio por asesinato para el 21 de septiembre de 2021, pero se pospuso para principios de abril de 2022.

Este primer juicio en contra de Márquez fue anulado el 8 de abril, “por un asunto con el jurado”, según señaló la fiscal Rosales.

El segundo juicio arrancó en mayo, pero debió ser suspendido durante diez días por un contagio de Covid en la Corte, lo cual alargó la espera por la justicia. Ahora fue dictada la sentencia; sólo falta, para sus familiares, encontrar el cadáver de Érika.