Afecta incendio a arrendadores en Ruidoso

El Paso.- La amenaza de que el fuego se expanda a otras áreas del bosque debido a los fuertes vientos que azotan en Ruidoso, Nuevo Mexico, provocó que cientos de turistas cancelaran sus viajes programados desde el pasado fin de semana.

La industria hotelera y arrendadores de cabañas asentadas en los alrededores se han visto afectados en su economía por la suspensión del alquiler de cuartos y casas, luego del incendio forestal que inició esta semana.

Aunque no se ha dado un reporte oficial de las pérdidas económicas por este rubro, se estima que las afectaciones no solo han presentado a este giro sino a otros comerciantes que han visto la disminución de su clientela.

Martín Alférez, propietario de una de las cabañas, ubicada en las cercanías del área denominada ‘Bosque Bonito’, a seis kilómetros de distancia, manifestó que desconoce aún si podrá dar alojamiento a una familia que previamente firmó contrato de arrendamiento para este fin de semana.

“Al momento desconozco si el camino que conduce a mi cabaña está bloqueado por la policía ante la amenaza del fuego, pero espero que las autoridades me confirmen hoy - ayer jueves- para poder notificar a mis clientes si podrán hacer uso de ella y puedan viajar con seguridad”, dijo el empresario.

Expresó que por fortuna su propiedad se encuentra justo al lado contrario de donde está el incendio, pero los fuertes vientos pueden llevar el fuego a otros sitios al cambiar su dirección.

“Si los vientos continuar así de fuertes es muy peligroso porque se lleva las brasas a otros sitios secos y pueden  multiplicar las quemas de la hierba”, agregó.

Comentó que el incendio, el cual se desconoce si fue o no intencional, inició en las cercanías del supermercado Walmart provocando la evacuación de decenas de personas y la destrucción de viviendas.

Consideró que al momento hay temor entre la gente del pueblo y visitantes que están dudosos en viajar o no este fin de semana por el peligro que acecha en el condado de Lincoln y sus alrededores.

“Medio pueblo abandonó el área y se tuvo que ir con sus familiares a las ciudades cercanas como Roswell y Alamogordo para salvaguardar su integridad”, expresó Alférez, quien desde hace siete años adquirió su cabaña.

Mencionó que es común ver incendios pequeños cada año pero ahora fue diferente debido a la sequía y los fuertes vientos nunca antes vistos en esa región. 

“Tumbó pinos de hasta 20 metros de altura y la gente que vive en sus trailas tuvieron que salir y abandonarlas para no ser lastimadas”.