Se extenderá 6 meses más crisis de chips

Chihuahua— Al menos un millón 400 mil automotores se encontraban fuera de la línea de producción en México por la escasez de semiconductores al corte de agosto pasado, y no se podían mandar a sus distribuidores, informó ayer Gabriel Casillas Olvera, Economista en Jefe para Latinoamérica de Barclays.

Durante su participación en el Foro Automotriz 2021 planteó que la falta de semiconductores perdurará al menos un semestre más por lo que continuará el impacto negativo en la producción de autos ligeros en México.

Mostró una gráfica en la que se detalla que los más perjudicados por la falta de chips es Ford en la producción de vehículos de la Serie F con 109 mil 710 unidades fuera de línea de producción; le sigue el de Jeep Cherokee con 98 mil 833 y el de Chevrolet Equinox con 81 mil 833.

Se detalla que en el caso del Chevrolet Malibu se tienen unas 46 mil 766 unidades fuera de línea de producción por la falta de semiconductores, 42 mil 195 del Jeep Compass, 37 mil 521 de Ford Eagle y 36 mil 463 de Ford Escape.

Casillas explicó que el tener varados tantas unidades “es algo muy grave”, ya que primero fue una tristeza para los distribuidores que el año pasado no vendían muchos autos, y ahora pueden venderlos y no los tienen.

También mostró una gráfica con información del Banco de México en la que detalla los días de paro de las plantas automotrices en México afectadas por la escasez de semiconductores u otros insumos.

Señaló que lo mismo han suspendido labores General Motor, Mazda, Toyota, Nissan, Ford Volskwagen, Honda y Stellantis/FCA.

Precisó que ahora no sólo faltan semiconductores o chips, sino otra clase de insumos como llantas y otros tantos, lo que ha generado un golpe importante del lado de la oferta y demanda automotriz.

Explicó que este problema se generó debido a que el año pasado a causa de la pandemia fue muy difícil planear qué oferta y producción se iba a tener de semiconductores, por lo que se tuvo una mala planeación.

También hubo un cambio en los hábitos de consumo, y la gente en lugar de demandar autos se fue por computadoras, consolas de videojuego, televisores y como los chips son bastante genéricos, las empresas redirigieron la oferta a otros segmentos de aparatos eléctricos.

El año pasado la gente dejó también de demandar muchos servicios como hoteles, restaurantes, entre otros y requirió más bienes para reparar su casa, jugar o entretenerse.

Pero este año cuando despuntó la demanda de los autos, y los proveedores de chips se vieron rebasados debido a que la demanda de los otros productos no ha bajado.

Indicó que pensar en ampliar las plantas productoras de chips es muy complicado, y se tardarían entre ocho meses o un año cuando van muy rápido y se tiene todos los requisitos para poder producir los chips, incluso a nivel de limpieza ya que es muy delicado.

mquezada@diarioch.com.mx