La Copa del Mundo que cambió todo
La decisión de realizar el Mundial en Qatar trastornó a un país diminuto, afectó la reputación de la FIFA y alteró el tejido del deporte
Jesús Carvajal / Agencia Reforma -
Jesús Carvajal / Agencia Reforma -
martes, 22 noviembre 2022 | 08:54
Doha— En Qatar, hay mexicanos que son muy solicitados en la Copa del Mundo pese a no ser futbolistas.
Se trata de los aficionados de México, que causan atracción en seguidores de otros países y todo a causa de ser poseedores de un sombrero de charro.
Ya sea en los estadios, Fan Festival o en paseos típicos de Doha como "La Corniche", los mexicanos son muy solicitados por los aficionados de otros países e incluso los de Qatar, quienes son mas reservados.
Un ejemplo es el de Juan Pablo Rodríguez, de Veracruz, quien mientras se paseaba por "La Corniche", asegura que posó para unas 100 personas.
"Prácticamente somos distintos, ellos saben el color que tenemos. Venimos representando a nuestras raíces y somos mexicanos aquí y para siempre", dijo Rodríguez.
"El sombrero es algo para ellos fascinante y jamás visto por ellos. Si nos ponemos a pensar, estamos del otro lado del mundo y para ellos tiene un significado importante", explicó.
Menciona que aunque es un orgullo que les pidan posar para fotos o prestar el sombrero, a veces es muy cansado.
"Es un orgullo, pero no nos podemos detener a cada rato. Es cansado, pero contento de que México, al fin y al cabo, no pasa desapercibido", declaró.
Ecuatorianos, neerlandeses, asiáticos, y especialmente qataríes, se acercan algunos tímidamente a los mexicanos para pedirles la foto o el sombrero.
Incluso con todo y el estigma que existe de la mujer en un país como Qatar, un grupo de jóvenes se acercan a un par de mexicanos y piden una foto.
Al término de la misma lucen emocionadas.
"Es que me encantan los mexicanos. He tratado de aprender algunas palabras como 'hola, mucho gusto', 'mi amor'", dijo emocionada la mujer qatari Rowda, quien estaba acompañada por dos amigas.
"Mexicano, mexicano", le gritan luego un par de qataríes a una dama afuera del Fan Festival de la FIFA, para pedirle que acceda a posar con ellos.
Es realmente una escena que se repite por todos lados y que hace sentir orgullosos a quienes portan un artículo emblemático de la cultura popular del País.
