Los deportistas de élite dan el salto al mercado empresarial

Cada vez más el deporte profesional adquiere un cariz mayor como negocio para todos los agentes involucrados. Esto hace que muchas marcas publicitarias se fijen en equipos, jugadores y otros protagonistas para difundir todos sus productos, y poder alcanzar a un mayor público potencial.

Desde hace algunos años, los principales deportistas de élite a nivel mundial, han estrenado también su faceta empresarial, utilizando su imagen y su buena prensa para poder convertir que su estrategia de emprendimiento sea un auténtico éxito.

Los ejemplos de este hecho, son múltiples y muy variados, según recoge la casa de apuestas deportivas Betway en un reciente estudio. En esta lista de emprendedores deportivos, se encuentran algunos nombres que se han convertidos en referentes históricos en sus respectivas disciplinas. Su idea, es tener al menos una parte del éxito empresarial, que han visto reflejados con su compromiso sobre su cancha de juego.

Cristiano Ronaldo, Rafa Nadal, Fernando Alonso, Lebron James, Maria Sharapova o Serena Williams engrosan esta lista con nombres que han marcado un antes y un después en sus respectivos deportes. Especial es el caso del astro del futbol portugués, ya que se ha convertido en el abanderado y en el máximo exponente de empresario de éxito, siendo deportista de nivel en activo.

La marca CR7 trasciende más allá del mundo del balompié, con 21 empresas en las que el portugués tiene una gran participación a modo de inversión y a la hora de tomar decisiones. La iniciativa de emprender de Cristiano Ronaldo fue del todo correcta, a tenor de la repercusión de compañías como CR7 Crunch (gimnasios) o Pestana CR7 (hoteles), conformando un auténtico referente en sus respectivos sectores de explotación, y con miras de una posible expansión a nivel mundial prácticamente asegurada.

Pero no solo del sector del ocio hay compañías de deportistas profesionales en el mercado. Fernando Alonso dio un paso al frente con su propia marca de ropa, Kimoa, y sin duda, por los resultados también de manera acertada. El poder lucir ese nombre por todos los circuitos del mundo, en las múltiples pruebas que el piloto español participa, hace que millones de personas se sumen al fenómeno Kimoa, aprovechando su tirón deportivo para hacer campañas de marketing con un público exponencial enorme, y consolidar su proyecto empresarial en todo el globo terráqueo.