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Deportes
sábado, 19 marzo 2022 | 17:37
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Nueva York.— El equipo de basquetbol varonil de la Universidad de Carolina del Norte pasó parte del mes de diciembre abrumado por Kentucky. El mes de enero le trajo más humillaciones en Miami y Wake Forest. Febrero incluyó el ser apaleado en su propia cancha por Duke y Pittsburgh y requirió irse a tiempo extra para derrotar a Syracuse, que tampoco había tenido un buen desempeño.
Luego, llegó marzo, los Tar Heels eliminaron a Duke y le arruinaron el último partido a Mike Krzvzewski en el Estadio Cameron Indoor el 5 de marzo.
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Luego, este sábado, en tiempo extra en Fort Worth, Texas, derrotaron a Baylor, que es el primer sembrado en el Este de la Regional y el reinante campeón nacional, para avanzar a la ronda de los 16 del torneo de la NCAA.
Cada una de esas emblemáticas victorias puede redimir cualquier temporada descabellada. ¿Pero hacer ambas cosas?
Como diría Roy Williams, exentrenador de Carolina del Norte: “carajo”.
Los Tar Heels, que son el octavo sembrado, enfrentarán a St. Mary´s de UCLA este viernes en Filadelfia.
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