Advierten a los fanáticos del Super Bowl que mantengan las precauciones

Con pruebas de coronavirus dos veces al día para jugadores, entrenadores y personal, un número récord de espectadores en persona y un espectáculo de medio tiempo socialmente distanciado, el Super Bowl LV, un enfrentamiento entre los Bucaneros de Tampa Bay y los Jefes de Kansas City que se celebrará en Tampa, Florida, se verá diferente al de años pasados.

Y a medida que se acerca el domingo del Super Bowl, hay razones para tener esperanzas: dos vacunas contra el Covid-19 altamente efectivas se están implementando en Estados Unidos y los casos y las hospitalizaciones han disminuido en todo el país.

Pero los casos permanecen en niveles que son casi dos veces más altos que el pico del verano pasado y nuevas variantes contagiosas rodean el mundo, algunas de las cuales parecen hacer que las vacunas sean menos efectivas.

Antes del gran juego, los expertos en salud pública y los funcionarios electos advierten a los fanáticos de todo el país que no organicen grandes fiestas que podrían convertirse en eventos de gran difusión.

El doctor Anthony S. Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del país y el principal asesor médico del presidente Biden para el Covid-19, instó a la gente a mantener al mínimo las celebraciones del Super Bowl viendo el partido en casa, señaló los picos de coronavirus que siguieron a celebraciones y días festivos como Navidad y Año Nuevo.

El Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades recomendaron organizar una fiesta virtual del Super Bowl o una reunión al aire libre donde los invitados puedan esparcirse a dos metros de distancia, pero incluso al aire libre es importante usar cubrebocas todo el tiempo.

El CDC también se dice que trate de evitar gritar, vitorear en voz alta o cantar, lo que puede aumentar la cantidad de gotitas respiratorias en el aire. En su lugar, aplauda, pise fuerte o use matracas. Si asiste a una reunión, la agencia recomienda traer su propia comida, bebidas, platos, tazas y utensilios.

En Florida, la N.F.L. albergará a menos de 25 mil fanáticos, un mínimo histórico, pero los bares y restaurantes permanecerán abiertos en todo el estado. La semana pasada, Jane Castor, la alcaldesa de Tampa, firmó una orden ejecutiva que requiere cubrebocas en ciertas áreas del centro de Tampa y cerca del Estadio Raymond James, el sitio del Super Bowl de este año.