Abarrotan fanáticos estadio tras superar pandemia

“Es la locura”, así es como lo describe Charlotte Power, una estudiante de 20 años. “Bailan, se divierten y esperemos que no haya peleas”.

Este sábado, Nueva Zelanda se convirtió en una de las primeras naciones en el mundo en darle la bienvenida a hordas de fanáticos que abarrotaron el estadio deportivo, gracias al increíble éxito que tuvo el país para eliminar el coronavirus.

Mientras otros países tratan de reabrir después de los cierres, el partido de rugby marcó un hito, y su importancia no pasó desapercibida para los fanáticos.

Después de imponer un estricto cierre en el mes de marzo, Nueva Zelanda no ha reportado ningún nuevo caso de coronavirus durante más de tres semanas, y dio a conocer que todos los que habían contraído ya se recuperaron.

A principios de esta semana, el país removió todas las restantes restricciones contra el virus, con la notable excepción de que mantiene cerrada la frontera.

Eso significó que no exigió que se usaran mascarillas ni se mantuviera la distancia social para los más de 20 mil fanáticos que inundaron el Estadio Forsyth Barr en Dunedin para ver el partido de este sábado entre los locales Highlanders y los Jefes, que viajaron desde Hamilton.