Opinion

La Columna

De los reporteros

2016-06-19

El país no puede ser rehén de ningún grupo de presión. El Gobierno federal finalmente actuó en Oaxaca como ha sido la exigencia de los ciudadanos que apuestan por la legalidad, el orden y la paz pública.
La permisividad y la tolerancia a los actos anárquicos han sido un lastre del que ya es tiempo que México se libere.
Hay demandas justas y legítimas que generan movilizaciones por todo el país y que deben ser atendidas, pero en el caso particular de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), el grupo ha dado infinitas muestras de actuar sin importar el daño a terceros, privilegiando sólo sus intereses particulares.
Cuando se cruza la línea del Estado de Derecho, con cualquier bandera, por parte de un grupo minoritario, ahí debe estar la fuerza pública para garantizar que prevalezca el interés colectivo.

***
Los priistas no descansaron en fin de semana preparándose para lo que viene. El sábado hubo encerrona en Chihuahua capital, convocada por el dirigente estatal Guillermo Dowell, a quien en redes sociales le están lloviendo ofertas para descubrir la “verdad histórica” de la derrota del TRI por siete a cero frente a Chile, en la Copa América.
El líder tricolor convocó a todos los involucrados en la pasada jornada electoral de los principales municipios al edificio del partido aunque la mayoría le hizo el desaire. De Juárez estuvieron Enrique Serrano Escobar y el ganador de la sindicatura, Aarón Yáñez, pero nadie más de los candidatos a diputados, ni ‘Teto’ Murguía o alguien de su equipo. De Chihuahua tampoco acudieron la mayoría de los derrotados en la contienda, ni por la alcaldía, ni sindicatura, ni diputaciones, salvo Maurilio Ochoa. Pero sí los dirigentes de los Comité Municipales.
Fueron convocados todos los diputados locales en funciones pero tampoco fueron, con excepción de Gloria Porras, la dirigente de la CROC que también es perdedora porque su hija iba en Juárez como candidata a diputada. Ni ella ni el dirigente de la CTM, Jesús José Díaz Monárrez, pudieron dejar su herencia en el Congreso del Estado.
El primero al turno en el micrófono fue el delegado del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, José Luis Flores, quien pidió el apoyo para el líder estatal.  Quienes ahí estuvieron le escucharon el mejor y más duro discurso pero lamentaron que se haya dado ya pasado el proceso electoral.
Luego habló el juarense dirigente del PRI para dar una explicación técnica de la impugnación, ya que ni siquiera muchos de los tricolores involucrados en la jornada del 5 de junio han captado donde está “el gato encerrado” que es la base del recurso que resolverán los tribunales.
Ahí Dowell puso énfasis no sólo en decir que al final de la jornada la suma de boletas anuladas y votos emitidos fue mayor en varias casillas al número de boletas recibidas (conforme a lo que se llenó en las actas de escrutinio), también dijo que en la sumatoria de todos los votos emitidos no se consideró específicamente el número de sufragios para el PRI o la alianza a la hora de llenar las actas.
No mostró nada, sólo lo dijo aunque sí adelantó que material hay hasta para poner “un museo del fraude”. A ver qué muestran a partir de hoy porque ayer también anunció que iniciaban una etapa de difusión de las actas con las anomalías.
El notario con licencia ya tiene experiencia en esos menesteres. Cuando el PRI impugnó las elecciones locales de 2001 y 2002 (la extraordinaria que se dio luego de una primera anulación), fue parte del equipo jurídico pero también del que trabajó la “socialización” de los recursos jurídicos.
Enrique Serrano habló después del dirigente tricolor pero le sacó la vuelta al tema de la impugnación. Mencionó incluso la madurez que adquirió en el proceso y dijo que siempre estuvo preparado para ganar o perder. Su discurso fue más enfocado a la unidad partidista y llamó a los priistas que acudieron a la sede partidista (aunque hubo ausencias se juntaron unos 80) a no dejarse llevar por la división en futuros proyectos.
No estaba previsto, pero el funcionario estatal que ya fue dirigente del Comité Directivo tricolor, Miguel Ángel González, tomó el micrófono y dejó claro que también está listo para lo que venga en la trinchera partidista. Por lo visto Dowell seguirá enfrentando la grilla por el control del tricolor en el estado.

***
En la encerrona del sábado, también se puso sobre la mesa otro pendiente por parte del dirigente estatal del PRI, que a muchos de los propios priistas sonó contradictorio. Se armarán mesas de análisis sobre los elementos que llevaron a los resultados del 5 de junio. Y como con la impugnación se entiende que todavía no está dicha la última palabra, no faltó quien se preguntara por qué se analizaba la derrota si se supone que todavía pueden resultar ganadores.
Pero las mesas de reflexión se realizan también como parte de una estrategia nacional de reformas partidistas para ubicar y cambiar lo que se ha hecho mal en el PRI y poder reestructurarse para el 2018.
Total que ya será a los dirigentes municipales a quienes corresponda armar esas mesas de análisis en el corto plazo. A ver cómo le va aquí a Mayra Chávez porque también son muchos los que le quieren mover el tapete para adelantar su salida.

***
Por el lado de los panistas, no todos estuvieron el fin de semana atentos únicamente al asunto de las impugnaciones del PRI. Varios traen ya la mira puesta en el 2018 y se fueron a la Ciudad de México porque andan en el barco del proyecto presidencial de Margarita Zavala, la exprimera dama de México.
La esposa del expresidente Felipe Calderón convocó a estructuras blanquiazules de todo el país y tuvo su evento para evaluar cómo va su proyecto para obtener la candidatura dentro de dos años. Por cierto que el sábado que llegó a la reunión nacional lo hizo sin Calderón a su lado, por aquello de que está en plan de sumar y no de restar.
Quién ya trae la coordinación en Juárez del proyecto de Margarita es el regidor electo, Eduardo Fernández Sigala, operador político que ha sido funcionario partidista tanto en el Comité Ejecutivo Nacional como en el Directivo Estatal.
Varios representantes populares blanquiazules y operadores electorales allá estuvieron también, como la diputada local Daniela Álvarez.
***
Donde tuvieron que trabajar en domingo fue en la Asamblea Municipal Electoral. El equipo de funcionarios que encabeza Eduardo Borunda armó las carpetas para mandar al Instituto Estatal Electoral (IEE), la información que se requiere para que a su vez esa instancia entregue todo el expediente al Tribunal Estatal Electoral, respecto a la impugnación de las elecciones que hizo el PRI.
Desde el viernes mandaron todo lo relativo a la elección de gobernador y ayer integraron lo relacionado a la de Ayuntamiento y diputaciones. Específicamente se mandarán las actas de la jornada electoral porque los paquetes siguen en resguardo en la bodega de la nave industrial que se habilitó para el proceso. Además de estar firmando los documentos que ayer mismo mandaron a Chihuahua capital, prácticamente terminaron de desarmar las oficinas.
Se espera que hoy en la capital el IEE finalmente haga llegar al Tribunal todo el paquete que incluye el documento de impugnación tricolor para que entonces sí inicien los magistrados su análisis.

***
Y a propósito de análisis de la impugnación, bien podría el Tribunal no entrar al fondo del asunto en el caso del Ayuntamiento de Juárez, si da por bueno el alegato del equipo del candidato independiente en el sentido de que el recurso se presentó fuera de tiempo.
El PRI está considerando el fin del cómputo hasta el sábado, con la declaración de validez y entrega de la constancia de mayoría ese día y presentó la impugnación al final del plazo de cinco días después, el jueves.
Pero en la propia Asamblea Municipal Electoral hay quien considera que se le pasó el tiempo al tricolor porque realmente el cómputo concluyó el viernes y de eso se dejó constancia en actas. Lo del sábado fue mero protocolo, aunque los priistas insisten en que hubo omisiones de la Asamblea Municipal en cuanto a levantar y entregar a todos el acta de finalización del cómputo. A ver qué decide el Tribunal.

***
Por el lado blanquiazul viene un importante jaloneo para ver quién se queda con la coordinación del grupo mayoritario en el Congreso del Estado.
En cuanto se le cayó a Mario Vázquez la diputación plurinominal gracias a los buenos resultados azules (ganaron 16 distritos y por el candado contra la sobrerrepresentación ya no entran al reparto de las curules de representación proporcional) se pensó que en automático el lugar sería para Miguel La Torre, quien ya fue regidor y dirigente del Comité Municipal del PAN en Chihuahua.
No va a ser tarea sencilla coordinar a otros 15 diputados y en teoría La Torre es el que tiene más experiencia pero se comenta que también tiene posibilidades por su cercanía con el gobernador electo, Blanca Gámez, quien ya fue diputada local y federal y le entra bastante al tema de la equidad de género.
 

X