Tiempo de los ciudadanos

José Ignacio Gallardo

Las campañas políticas para renovar el Congreso local y los 67 municipios arrancaron el pasado jueves 28 de abril y terminarán 3 días antes de la jornada electoral del 5 de junio. Candidatos y candidatas recorrerán calles y colonias en la búsqueda del voto ciudadano. Se les verá en los cruceros más transitados y los juarenses se los toparán en los recorridos que hagan por barrios, colonias y fraccionamientos de esta frontera. Y lo mismo pasará en los restantes 66 municipios del estado de Chihuahua. Muchos de los candidatos apoyados por algún partido o en la nueva modalidad de independientes, ya tienen definidas algunas promesas de campaña que estarán impulsando en estas elecciones para tratar de convencer al ciudadano para que les otorgue el voto.
Pero también se dan los casos de candidatos que no tienen la menor idea de lo que andan haciendo y diciendo. De igual manera preocupantemente se puede observar que hay partidos que no tienen la menor intención de hacer campañas, esto a pesar de que han recibido cuantiosos recursos del erario público. No se les ve por ningún lado y seguramente no se les verá en lo que resta del proceso electoral.
Pero volviendo a los partidos políticos y candidatos independientes que sí están haciendo campañas, es evidente que deben poner más atención en las demandas ciudadanas. En cada recorrido los candidatos reciben infinidad de peticiones y sugerencias directamente de los electores. Desafortunadamente la mayoría de esas peticiones son totalmente ignoradas, quedan en el olvido y sólo reviven cada que hay elecciones. Y esta es valiosa información tirada a la basura, ya que muchas de estas peticiones o exigencias ciudadanas que ciertamente vienen cargadas de una buena dosis de indignación también aportan soluciones realmente efectivas.
A diferencia de los políticos, funcionarios y burócratas, es la lógica y el sentido común de los ciudadanos lo que resalta en las soluciones que ofrecen para los problemas que enfrenta la comunidad.
Por eso es tiempo de que la clase política deje de pronunciar trillados discursos y se comience a escuchar a los ciudadanos. Es el momento de que se dejen de tomar decisiones unilaterales que perjudican a muchos y se llegue a los acuerdos surgidos de los consensos.
Es tiempo de que se dé una reconciliación entre gobernados y gobernantes ya que se requiere que las instancias de gobierno sepan de las verdaderas necesidades de quienes habitan esta frontera, y no sólo se gobierne en base a ocurrencias. En los temas de seguridad, de economía, desarrollo social se tienen muchas asignaturas pendientes que se vienen arrastrando desde hace muchos años.

Pero también en otros aspectos relacionados con la educación, el impulso al deporte, a la cultura y al arte hay muchos pendientes y se requiere mayor atención y voluntad de los tres niveles de gobierno.
En el terreno turístico no se puede negar que se han dado avances, pero sin duda falta mucho por hacer en esta importante actividad que ha sido descuidada por muchas administraciones municipales.
El tema de la contaminación ambiental en esta frontera debería preocupar más y se le tiene que poner más interés y voluntad política, si no se quieren tener problemas como los que actualmente aquejan a la capital del país y a otras grandes ciudades mexicanas con altos índices de contaminación.
La imagen urbana es un asunto que tampoco puede ser desdeñado por candidatos y por los ciudadanos juarenses. La estética de la ciudad no es un asunto menor y requiere del involucramiento de toda la sociedad, no sólo del gobierno, para tener una urbe a la altura de las grandes ciudades.
Mejores empleos, mayor número de guarderías, un trasporte digno y accesible para todos los juarenses, tienen que ser los temas en las agendas de los políticos en este proceso electoral.  Si no se incluyen estos puntos en las propuestas de campaña, entonces los ciudadanos deben hacerlo. 
Este es el tiempo de los ciudadanos, no de los partidos o de los independientes. Este es el mejor momento para peticiones y sugerencias. Su decisión y su voto es el poder que tienen los ciudadanos para hacer valer su opinión, y que su voz se escuche. Serán los juarenses los que decidan si utilizan ese poder o no.