Opinion

La Columna

De Los Reporteros

2015-08-27

-Impactan en Chihuahua los cambios en el Gabinete Peñista; se fortalece el grupo Delicias y la posibilidad de que Graciela Ortiz González obtenga la postulación a la gubernatura por el PRI

-Dos lecturas acerca de las decisiones del presidente: amplía la lista de presidenciables y fortalece política y administrativamente la espina dorsal de su administración

-Chuayffet, Rubido y Murillo Karam las salidas que más llamaron la atención

De lo más rescatable de los cambios que se dieron ayer en el gabinete del Presidente Enrique Peña Nieto es que un chihuahuense fue tomado en cuenta. Ya se había especulado al respecto, pero ayer se confirmó la promoción de José Reyes Baeza Terrazas, quien de la vocalía ejecutiva de FOVISSTE pasa a la titularidad de la Dirección General del ISSSTE.

Claro que esos cambios desataron especulaciones por estos lares, despertando el entusiasmo entre quienes se identifican con el ex gobernador, porque sienten que se fortalece a tal grado ese bando que, como consecuencia, se disparan las posibilidades de que influya a la hora que el PRI decida a quién postular como candidato a la gubernatura.

Al Margen de que se ha ligado a otros suspirantes con el Grupo Delicias y el apellido Baeza, se dice que la más favorecida con estos cambios y en relación a la carrera por la candidatura a gobernador, es la senadora Graciela Ortiz González, aunque claro, eso todavía está por verse. No faltan los que consideran que no hay que irse con la finta, que la política no es tan diáfana y que hay que tomar en cuenta que en ese ambiente todo son negociaciones, por lo que si a Reyes Baeza ya le dieron juego en el gabinete, es probable que a los líderes de los otros grupos que también preparan a sus gallos para la gubernatura, les den mano en las decisiones que tienen que ver con el proceso electoral del ya cercano 2016.

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Es un hecho innegable que, de cara al segundo tramo de su gobierno y en vísperas de su tercer informe, el presidente Peña Nieto estrujó a su gabinete con cambios no advertidos ni por los más agudos observadores de la política mexicana. Dos lecturas preliminares: amplía la lista de presidenciables y fortalece política y administrativamente la espina dorsal de su administración.

Muchos pensaron que Osorio Chong caería con la fuga del Chapo, nada, ayer Peña le concedió el honor de presentar a los nuevos funcionarios en sus respectivos cargos. Ese gesto lo ratifica en su categoría de segundo en el gabinete. Videgaray, junto a Osorio, Ruiz Esparza y los secretarios de Defensa y Marina son la fortaleza de la administración, lucen inamovibles.

Esta parte admite un comentario entre paréntesis: los mayores problemas del país, en éste momento, no son los asociados a la seguridad, el reto actual está en la inestabilidad económica, circunstancia que deja los reflectores sobre el rostro de Videgaray y los aleja de Osorio.

La incorporación de José Antonio Meade, en la Secretaría de Desarrollo Social, es el nombramiento más visible. El ahora Secretario de Desarrollo Social es un personaje cuya versatilidad lo hace atractivo al análisis. Durante el sexenio de Calderón ocupó las secretarías de Energía y Hacienda, se filtró a la administración priista de Peña como Secretario de Relaciones Exteriores, y desde ayer ocupa la oficina de Sedesol. A él lo movieron exclusivamente para apuntarlo en la lista de los “pre”, aunque no tenga pinta de candidato.

El otro es Aurelio Nuño, cercanísimo al Presidente. Lo sacan de la Oficina de la Presidencia, de alta importancia y abundante cabildeo palaciego, pero oscura para efectos de visibilidad mediática, y le entregan Educación, secretaría que ofrece la oportunidad de exposición social. Por lo tanto, también Nuño queda enlistado.

A los nombres de Osorio, Videgaray, Meade y Nuño –en ese orden– agregue el de Beltrones y tendrá la quinteta de Peña rumbo al 2018. Faltan dos años para la definición, mucha agua pasará bajo el puente hasta entonces; sin embargo al corte de ayer son ellos los cinco colocados en los carriles de competición.

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Aunque la noticia principal es quiénes llegaron al gabinete peñista, también es importante analizar quiénes quedaron fuera.

La salida que más llama la atención es la de Emilio Chuayffet Chemor de la Secretaría de Educación Pública, en la que tuvo como principal encomienda poner en marcha la Reforma Educativa, la primera de las reformas estructurales en ser aprobada como parte del Pacto por México, y como consecuencia tuvo que hacer frente a las protestas de la CNTE, que crecieron hasta el grado de amenazar con no permitir el inicio del ciclo escolar 2015-2016; enfrentó además la huelga en el Instituto Politécnico Nacional, aunque la batuta de la negociaciones finalmente quedó en manos del secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong. A últimas fechas había presentado problemas de salud, fue intervenido quirúrgicamente y a principios de mes fue hospitalizado supuestamente al sufrir una deshidratación como secuela de esa operación. Apenas el lunes pasado había reaparecido públicamente y no alcanzó a terminar la semana cuando le dieron las gracias por “haber contribuido a la transformación de México”.

También llamó la atención la salida de Jesús Murillo Karam de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), a la que había llegado apenas en febrero pasado luego de estar al frente de la Procuraduría General de la República desde el principio del actual gobierno. Él presentó a Joaquín “El Chapo” Guzmán cuando fue apresado luego de 13 años prófugo. Encabezó las investigaciones por la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, ocurrida el 26 de septiembre de 2014, y es responsable de exponer la “verdad histórica” sobre ese caso, en el sentido de que los normalistas fueron asesinados, calcinados y sus restos arrojados a un río, versión sobre la que pesan muchas dudas hasta estos días. Su frase más famosa es el “ya me cansé” que pronuncio cuando creía que ya le habían apagado los micrófonos durante una conferencia de prensa y que se convirtió en el hashtag #yamecansé al que se le agregaron en las redes sociales los complementos …de la corrupción, de las desapariciones, de los feminicidios, de la clase política, y un largo etc.

Uno de los que había sido más cuestionados a partir de la fuga de “El Chapo” Guzmán por su permanencia en el cargo es Monte Alejandro Rubido, Comisionado Nacional de Seguridad desde el 18 de marzo de 2014. La comisión a su cargo informó que no había indicios de que el líder del Cártel de Sinaloa fuera a escapar y que se les fuga. Además, ante los señalamientos de que durante un supuesto enfrentamiento entre policías federales y delincuentes el 22 de mayo pasado en Tanhuato, Michoacán, decenas de personas fueron ejecutadas, Rubido siempre negó que ello hubiese ocurrido. A la titularidad de la Comisión Nacional de Seguridad llegó con la encomienda de articular la estrategia de seguridad de los tres niveles de gobierno, dotar a los municipios de recursos para combatir la violencia y la inseguridad, y poner en marcha la Gendarmería Nacional. Hoy estas responsabilidades quedan a cargo de Renato Sales Heredia, quien lo releva en el cargo.

Otros a los que les reconoció el presidente su desempeño al frente de las responsabilidades conferidas, pero ayer les dijo adiós son: Juan José Guerra Abud (Semarnat), Enrique Martínez y Martínez (Sagarpa) y Antonio Godina Herrera (ISSSTE).

 

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