Movilidad por Arte de Magia

Edna Lorena Fuerte

La magia es una cuestión compleja. En un año Japón logró reparar toda la infraestructura dañada por el terrible temblor de 2011, el caso más emblemático fue el tramo de 150 metros de la autopista Gran Kanto, reparado en sólo seis días, donde por reparado se entiende regresado a las mismas condiciones del día de su inauguración. Las declaraciones de nuestro ex presidente municipal sobre el actual, deplorable, estado de las obras del Plan de Movilidad Urbana, no demuestran sólo la ya evidente carencia de organización y planeación a favor de una correcta administración de la urbanidad, sino una total falta de seriedad y diplomacia con todos aquellos juarenses que, a un año y 7 meses de retraso, se siguen preguntando el por qué por lo menos no se toman las medidas apropiadas. Tenemos aquí el caso perfecto donde la dura y polvorienta realidad de los hechos, o sea un retraso terrible en la realización del proyecto, calles destrozadas por montones de escombros, vialidades interrumpidas desde hace meses, negocios a punto de la quiebra a causa de las obras; choca con el cinismo de quienes declaran que sólo un mago hubiera podido conocer las condiciones del terreno en que iban a trabajar. Un mago, o un ingeniero especializado tal vez. Es Teto Murguía quien atribuye la historia del mago al actual presidente municipal Serrano, tal vez para cubrirse de las acusaciones que este mismo le lanzó respecto al retraso. Entre los dimes y diretes el ex alcalde dijo que la razón por la que se “hubiera necesitado un mago” es porque falta un plan preciso de las tuberías y de toda aquella infraestructura subterránea que impidió que las labores se realizaran a tiempo. ¿Cómo es posible, me pregunto, que un proyecto tan ambicioso en materia de alcance y tiempo, y de recursos también, careciera de una información tan básica para su misma realización, y cómo es posible que la administración de la ciudad use esta falta como justificación? Resulta entonces más grave que el retraso mismo de las obras, lo que esta problemática ha sacado a flote: la ciudad más importante de la frontera, la más poblada de nuestro estado y una de las que aporta más ingresos a nivel nacional no tenga un mapeo de sus entrañas. De ser cierto lo que dicen estos funcionarios, tendría que haber una investigación de fondo de las administraciones anteriores y un urgente planteamiento de soluciones. Es inconcebible que subsista una carencia de este tipo que seguirá afectando todas las obras futuras. Mientras tanto, en muchas zonas de Juárez las obras siguen en marcha, a un ritmo que afecta tanto a los trabajadores como a los residentes. Como siempre, los errores en el cálculo de los tiempos caen en los hombros de quienes trabajan bajo el sol a ritmos inhumanos, mientras los responsables no hacen nada más que pelear sobre la abstracción de esta realidad tangible: hay quién, como el Secretario del Ayuntamiento, atribuye los retrasos al robo del adoquín por parte de algunos “vándalos”. Pero eso no es lo único que falta, más preocupante es el estado de las labores inherentes a la colocación de árboles, luminarias, pozos de absorción y semáforos en algunas zonas totalmente ausentes todavía, sin hablar de los puentes peatonales que de ninguna forma tienen que ver con la composición del subsuelo. A propósito de la cuestión de las tuberías, el encargado ya declaró que sus labores están concluidas desde hace 40 días y todo lo que queda hacer es totalmente responsabilidad de la empresa MOVICOM, encargada de la construcción. El último día hábil para la entrega de este polémico proyecto a una ciudadanía cansada de abrirse paso entre el polvo y los escombros, el Ayuntamiento no ha actuado con resolución, incluso los panistas ya le habían tratado de enmendar la plana diciendo que se debía sancionar a la empresa MOVICOM por su vergonzoso retardo. En cambio, se decidió posponer nuevamente la fecha: tres meses más, ahora. Si un proyecto que tenía que consolidarse en un solo año se está tardando tres ¿Cuánto tenemos que pensar que van a durar estos tres meses? ¿Por qué, en lugar de hablar de magia y disparar fechas al azar (hay quienes, como el ex director de obras públicas Manuel Ortega, dicen que todo va a estar listo en dos semanas), no se plantea un análisis más serio, contemplando todo lo que falta por hacer y planeándolo día a día, con un calendario a la mano, consultando los expertos en vialidad, tránsito y construcciones? ¿Cuánto podemos aguantar los juarenses los errores e ineficiencias pagados con el dinero de nuestros impuestos –y de nuestros hijos porque el préstamo va a endeudarnos por mucho tiempo–, antes de poder tener unas calles y avenidas que puedan por lo menos funcionar como antes? Al final la gran pregunta ya no es cuándo se terminará esta obra, sino ¿cuándo habrá un gobierno que de verdad pueda informarnos con eficiencia sobre sus acciones, ser claros en materia de tiempo y dinero, sobre todo en lo relativo a un proyecto, a cualquier proyecto, sin buscar siempre la justificación fácil o de culpar a los demás sin tomarse nunca la responsabilidad de los hechos? Se necesitaría un mago para saberlo. Por si fuera poco y en el maremágnum de las apuestas por un puesto en el altiplano, el Gobernador del Estado, anuncio que vetara la parte de la reforma electoral que agrega más diputados, ah pero todo lo demás no, mucho menos los candados a las candidaturas independientes. Valiente favor le hará la cúpula priista a sus propios afiliados y simpatizantes si se les ocurre que el mejor representante del relevo generacional que perfilo Peña Nieto en el reciente discurso ante la clase política tricolor es un Gobernador norteño que aprieta y aprieta la liga política a sus conciudadanos y que además, según parece, no le importa o por lo menos no se da cuenta de ello. EL LIBRO DE LA SEMANA. Amigas y amigos, hoy les comparto UN MUNDO FELIZ. Clásico del siglo pasado cuyo autor Aldous Huxley nos narra la historia de una sociedad creada en incubadora donde todo mundo es feliz, no hay familia ni prohibiciones ni enfermedades ni dolor, sin embargo, fuera de ese entorno hay otro mundo…y resulta que es el real...curiosamente nuestros políticos viven su mundo feliz y piensan que esta es la realidad…!!!.Por supuesto, y como siempre, recibiré sus comentarios con agrado: @ednalorefuerte.