Christopher D. Shea / New York Times News Service
2015-08-03
Londres— Un nuevo museo dedicado a Jack el Destripador, ubicado en el vecindario por donde alguna vez merodeara, es el tema de un acalorado debate –en gran parte debido a que el museo fue propuesto en un inicio como un museo “de alta categoría” dedicado a la historia de las mujeres cuando fue presentado como proyecto ante los funcionarios para que éstos aprobaran su planeación.
El verano pasado, Waugh Thistleton, una compañía de arquitectura contratada por el ex ejecutivo de Google, Mark Palmer-Edgecumbe, presentó una solicitud ante el Consejo de Tower Hamlets para pedir permiso de abrir un museo en honor a las mujeres de East End, uno de los distritos históricamente más problemáticos de Londres.
En la solicitud se hace referencia al centro como el primer museo de las mujeres en Gran Bretaña, y dice que “reinterpretará la historia de East End”, la cual, según agrega, “es por lo general contada desde la perspectiva de la pobreza, la delincuencia y el conflicto social”. (El ahora próspero distrito de East End solía ser un hervidero de delincuencia hasta la década de los noventas.) El consejo concedió el permiso para el museo el pasado otoño.
Pero los habitantes de la localidad se dieron cuenta de que habían recibido un tipo de museo muy distinto cuando, el mes pasado, la fachada del lugar fue revelada, anunciando el Museo de Jack el Destripador, dedicado al hombre que asesinó a por lo menos cinco mujeres a finales del siglo XIX en el este de Londres, y cuya identidad sigue siendo un misterio.
Al ser contactado por correo electrónico, Palmer-Edgecumbe dijo que se sentía “muy triste por la reacción que tuvo el museo y que él creía que esto se debía a un mal entendido sobre lo que ellos intentaban hacer”. Luego agrego que, “nuestro museo es una seria examinación de los eventos ocurridos en East End a finales del siglo XIX, y no una glorificación de Jack el Destripador, o de sus crímenes.”
Un comunicado en el sitio Web del museo hace eco a lo estipulado en la solicitud de planeación original, diciendo que la institución “ofrece una mirada a la historia de las mujeres de East End durante la época victoriana y abre una discusión sobre el porqué las mujeres, al tener tan pocas opciones de vida, se veían orilladas a caer en la prostitución”. Las víctimas de los asesinatos, tradicionalmente atribuidos a Jack el Destripador, eran todas prostitutas.
Pero el sitio Web también incluye la historia de Jack el Destripador, y el museo ha posteado en Twitter varias veces sobre el tema, incluso uno de estos tuits se hace referencia al “estudio del infame asesino serial”.
En entrevista, Andrew Waugh, director de Waugh Thistleton, dijo que los arquitectos que prepararon los planos originales informaron que la compañía no estaba enterada de los planes de cambiar la temática del museo. Waugh dijo que había trabajado con Palmer-Edgecumbe antes de presentar la solicitud el verano pasado, y que había visitado el lugar varias veces.
Sobre el museo de Jack el Destripador, Waugh dijo que “es una lasciva y misógina estupidez. No estamos interesados en ello”.
El museo abrirá el martes, según reportó The Guardian, pero ni Palmer-Edgecumbe ni el museo respondieron para confirmar la fecha.