María Celeste: la niña sicaria al servicio de Los Zetas

Agencias

María Celeste, una niña sicaria, relató que había sido reclutada en poco tiempo y que justo había concluido su formación con Los Zetas cuando fue detenida por las autoridades.

María Celeste, de dieciséis años, es originaria de Ciudad Victoria, Tamaulipas, lugar donde exmilitares la instruyeron con preparación física y manejo de armas de fuego. Tras ser cuestionada respecto a cómo se interesó en formar parte del grupo criminal, declaró que recibió la invitación a través de unos amigos.

La niña sicaria logró ser miembro del cártel más sanguinario de México solo después de dos meses de adiestramiento, y Los Zetas le garantizaron un sueldo superior a los 4 mil pesos quincenales, salario que jamás podría obtener en un empleo legal.

Sin embargo, con solo cuatro días de carrera criminal, la joven fue arrestada en 2011 cuando agentes de las corporaciones policiales, tras cuatro horas de persecución y enfrentamientos, lograron cazar el convoy de camionetas blindadas en el que se encontraba un comando de adolescentes.

En el enfrentamiento, María Celeste fue arrestada junto con otros nueve gatilleros de entre dieciséis y 21 años de edad en el municipio de San Cristóbal, lugar en el que también fueron detenidas otras seis jovencitas.

Las delincuentes fueron aprehendidas y presentadas ante los medios de comunicación en las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, en la ciudad de Guadalajara, donde la niña sicaria relató algunos detalles de lo que aprendió durante los días de adiestramiento.

María Celeste declaró que con Los Zetas aprendió a utilizar armas tipo AK-47, AR-15 y hasta armas de grueso calibre, “manejo el cuerno, la erre y las cortas”.

Un periodista que se encontraba en el lugar le preguntó a la adolescente a qué se dedicaba, a lo que respondió, “Soy María Celeste y soy sicaria al servicio de Los Zetas“.

María Celeste fue procesada por los delitos de posesión y portación de armas de uso exclusivo del Ejército y delincuencia organizada; sin embargo, la niña sicaria señaló que, hasta el momento de su arresto, no había cometido asesinatos ni participado en actos violentos.