Reforma
2018-08-22Ciudad de México— Tres comandantes de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina (SSP) fueron vinculados a proceso por abuso policial y lesiones contra un reportero gráfico de Grupo Reforma, así como a una de sus familiares.
Se trata de mandos de Unidades de Protección Ciudadana (UPC) en la Delegación Cuauhtémoc de la Ciudad de México.
Uno de ellos también fue señalado como probable responsable de robo agravado de un teléfono celular a una adolescente, familiar del fotógrafo.
Sin embargo, los tres mandos continuarán su proceso en libertad, debido a que promovieron un amparo ante un Juez de Distrito, por lo que el Juez local no pudo pronunciarse sobre las medidas cautelares contra los imputados.
De los tres, sólo uno de los imputados está suspendido de su cargo. Los otros dos siguen en funciones.
En la audiencia iniciada el 16 de agosto y que continuó ayer, en la Sala 27 de los juzgados de Doctor Lavista, los agentes del Ministerio Público realizaron la petición de vinculación a proceso por los hechos ocurridos entre las 00:25 horas y las 00:35 horas del día 8 de julio en la Colonia Doctores.
De acuerdo con la imputación realizada por el MP, ese día el reportero gráfico y miembros de su familia salieron a la vía pública tras escuchar gritos, golpes y ruidos. Ahí vieron a varios policías realizando un operativo.
El fotógrafo se identificó con unos de los comandantes y le preguntó qué sucedía, él en respuesta le dio un manotazo y le tiró su credencial.
Luego, el comandante se dirigió a los familiares de la víctima, le arrebató a una de ellas su teléfono celular y se lo guardó, de acuerdo la teoría aportada por la Ministerio Público.
El reportero acudió por su equipo de fotografía para documentar la acción policial, y al volver fue golpeado por varios agentes, quienes lo arrojaron al suelo y lo insultaron a él y a su esposa.
Él resultó con múltiples lesiones, que tardan en sanar más de 60 días.
Después de que las víctimas realizaran la denuncia, el agente del Ministerio Público logró reunir otras pruebas como informes médicos, de la Policía de Investigación y videos de cámaras de seguridad de la zona.
Así, la Fiscalía logró acreditar la existencia del hecho y la probable participación de los tres comandantes de la SSP local.
El Juez Pedro Taboada Bautista otorgó dos meses para la investigación complementaria, en donde tanto el Ministerio Público como la defensa deberán aportar pruebas en contra o a favor de los mandos de la Policía capitalina, quienes siguen en sus puestos de trabajo.