Reforma
2017-12-09
Ciudad de México– La discusión de la Ley de Seguridad Interior en las comisiones del Senado se pospuso luego del exhorto del Presidente Enrique Peña Nieto de ampliar el diálogo con organizaciones.
“Con la finalidad de continuar con el diálogo entre el Senado y la sociedad civil y atendiendo al exhorto que hizo el titular del Ejecutivo federal, hemos decidido posponer la reunión de comisiones unidas convocada para el día lunes, en torno a la minuta de la Ley de Seguridad Interior”, indica un comunicado a nombre de los presidentes de las comisiones de Gobernación, Defensa Nacional, Marina y de Estudios Legislativos Segunda.
“Consideramos necesario que este espacio de análisis, previo a la deliberación legislativa, continúe para escuchar las diversas voces, y contar con una ley de amplio consenso”.
Tras el diálogo abierto, los senadores prevén presentar el dictamen ante el Pleno antes de que concluya el período de sesiones, el próximo 15 de diciembre.
La Ley de Seguridad Interior fue aprobada ‘fast track’ el 1 de diciembre pasado en la Cámara de Diputados con los votos del PRI, PVEM, Nueva Alianza, Encuentro Social y de algunos panistas y perredistas.
La iniciativa de 34 artículos regula la actuación del Ejército y la Marina en tareas de seguridad pública en las entidades federativas.
El proyecto ha sido criticado por organismos internacionales, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y especialistas mexicanos.
El representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Jan Jarab, envió una carta al Senado para solicitar la no aprobación de la Ley.
Expuso que la redacción de la Ley contiene conceptos laxos y permite la aplicación extensiva, discrecional y arbitraria de la misma.
“Entre otras consideraciones, generaría riesgos para la vigencia de los derechos humanos, no aportaría soluciones reales para enfrentar los enormes retos que en materia de seguridad enfrenta el país”, advirtió.
A su vez, el Ombudsman Luis Raúl González dijo que el despliegue reactivo de las Fuerzas Armadas sólo atenderá síntomas pero no dará una solución de fondo.