'Me esperan 23 kilómetros de papamóvil'

Agencias

A bordo del avión papal, México— Visiblemente satisfecho tras su encuentro en La Habana con el líder de la Iglesia ortodoxa, el Papa Francisco regresó bromista al avión que lo lleva a la Ciudad de México.
"Ahora me esperan 23 kilómetros de papamóvil", dijo riéndose, en referencia al recorrido que hará del Aeropuerto Internacional Benito Juárez a la Nunciatura apostólica.
Se espera que capitalinos marquen con luz, de linternas o teléfonos móviles, el camino de Francisco hasta la Nunciatura, donde pasará su primera noche en el País.
"Fue una conversación de hermanos, con puntos claros que a los dos nos preocupan. Hemos hablado con toda franqueza y yo me he sentido como delante de un hermano y él me ha dicho lo mismo", explicó el Papa en relación al histórico encuentro de dos iglesias separadas durante cientos de años.
El Pontífice explicó que durante las dos horas de reunión fue como si hablaran dos obispos de las situaciones de sus dos iglesias.
Añadió que con el líder ruso se habló de la actual situación en Medio Oriente.
"(De esta) guerra a trozos, pero que corre el peligro que ahora sea una guerra que implique a todos".
Desde septiembre de 2015, con la participación activa del Presidente cubano Raúl Castro, se empezó a trabajar para tener este diálogo con la Iglesia ortodoxa, reveló el Pontífice.
La declaración de 30 puntos que los dos jerarcas firmaron en Cuba, es una declaración pastoral y no política, precisó Francisco.
También informó que fue aprobado un programa de posibles actividades en común.
"La unidad se hace caminando", añadió.