Reforma
2016-02-11
Ciudad de México— En el arranque de la 63 Legislatura, los grupos parlamentarios de San Lázaro ofrecieron austeridad y mayor transparencia, pero en 4 meses derrocharon 473.3 millones de pesos de los mexicanos para su gastos administrativos y bonos.
Además, en medio de la crisis de las finanzas nacionales por la caída del precio del petróleo, los diputados se dan el lujo de hacer "cochinitos" con las subvenciones que les otorgan.
Entre septiembre y diciembre de 2015, las bancadas mantuvieron la opacidad sobre el destino preciso del dinero de los mexicanos, porque la Cámara no ha aplicado las medidas de transparencia.
De los 473.3 millones de pesos, 175.4 millones corresponden a tajadas extraordinarias -sin reconocimiento en la Ley Orgánica del Congreso- que los coordinadores pactaron repartirse para la remodelación y equipamiento de oficinas, así como para sobresueldos a los legisladores.
Sin embargo, los diputados justifican la mayoría del dinero en gastos de nómina, pago de asesorías y "servicios generales". No hay precisión alguna en qué consisten éstos últimos.
En cuatro meses, el PRI recibió 191.6 millones de pesos; PAN, 95.7 millones; PRD, 57.5 millones; PVEM, 42.2 millones; Morena, 34.7 millones; Panal, 13.5 millones y PES, 12.1 millones.
Además, los saldos que las bancadas reportan en sus estados financieros son montos similares a la bolsa adicional que recibieron.
Las tajadas extras fueron por 175.4 millones de pesos y las bancadas, con diferentes proporciones, sumaron ahorros por 134.4 millones de pesos.
Es decir, de la bolsa total de 473.3 millones, las fracciones hicieron "cochinitos" con 28.3 por ciento del recurso.
Al inicio de la 62 Legislatura, los diputados gastaron 502 millones de pesos, pero en las subvenciones variables ocultaron las tajadas extras, que se formalizaron en los siguientes años.
Sólo Movimiento Ciudadano (MC) cumplió su promesa de austeridad y regresó 9 millones de pesos de la tajada extra que se distribuyó en diciembre y se quedó con 16.9 millones de pesos.
"Todos los grupos parlamentarios debemos ser responsables de bajar nuestro gasto corriente", exigió Clemente Castañeda, coordinador de MC.
Sin cambios
La dinámica de gasto no cambió entre la 62 y 63 Legislaturas. La subvención fija se mantiene en un millón de pesos mensuales por bancada.
En tanto, la subvención variable -que también ya se hizo fija-, se calcula en 116 mil pesos al mes por cada uno de los 500 diputados.
El monto se multiplica por el número de integrantes en cada fracción.
La llamada subvención extraordinaria registra variables, pues en el informe más reciente el cálculo por diputado quedó en 350 mil pesos.
Así, la bancada priista recibió 191.6 millones de pesos en cuatro meses. De esa bolsa, 74.8 millones fueron de la partida extra, y reportan un total de egresos de 130.6 millones en el mismo periodo.
Aunque los legisladores priistas anunciaron austeridad en gastos de telefonía celular y uso de vehículos, estos ahorros no se detallan en sus informes.
La bancada tricolor tiene un saldo a favor de 61 millones de pesos, y no explica cómo logró ese sobrante ni a qué lo destinará.
Al grupo parlamentario del PAN le entregaron 95.7 millones de pesos, y su subvención extra fue de 35.5 millones.
Sus gastos sumaron 73.7 millones, por lo que los panistas reportaron un excedente de 22.4 millones.
Aunque los panistas presumen la transparencia como prioridad, presentaron un informe con el mismo formato de pasadas legislaturas y sin mayor detalle sobre el destino del dinero.
Así, de forma generalizada reportan 35.1 millones de pesos gastados en nómina; 10.4, en servicios profesionales y 16.7 millones de pesos en "otros servicios generales".
La bancada perredista registró ingresos por 57.5 millones de pesos, de los cuales 21.7 millones son de la partida extraordinaria. Sus egresos fueron de 50.5 millones y obtuvieron ahorros por 7 millones.
Sin plan de ahorro, la fracción del sol azteca sólo renunció al seguro de gastos médicos mayores.
Sin embargo, la bancada del PVEM guarda el monto mayor de las subvenciones recibidas.
De una bolsa de 42.2 millones de pesos, solo gastó 16.3 millones, por lo que el "cochinito" del partido del tucán quedó en 25.8 millones de pesos.