Staff/
El Diario de Juárez
Ciudad Juárez- Un Tribunal de Control declaró ilegal la detención de tres de las cinco personas arrestadas el viernes pasado y de quienes inicialmente se dijo estaban implicados en el crimen del exregidor Hiram Contreras Herrera, al determinar que su arresto fue ilegal.
La jueza de Control, Rocío González Lara, ordenó la libertad de Ernesto Vázquez Olivas, Román Anaya Martínez y Lorenzo Martínez Salazar, debido a que los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) los detuvieron porque ellos estaban en una casa a donde presuntamente ingresaron los otros dos detenidos Ricardo y Miguel Ángel Vázquez Olivas.
Los familiares de los cinco arrestados denunciaron que todos fueron golpeados por agentes de la SSPM a cargo de las unidades 656, 606, 510, 407-C, P-222, 014, 656 y 404-C cuando irrumpieron en su casa de la colonia Plutarco Elías Calles, de donde también robaron una chamarra de piel, dos perfumes, una tablet, un Play Station y unos tenis.
Ayer los cinco hombres fueron trasladados del Cereso 3 de Juárez a la octava sala de la Ciudad Judicial, en donde un agente del Ministerio Público (MP) le informó a la jueza que la detención se realizó el viernes a las 19:10 horas después de una persecución que inició en las calles Isla Tasmania e Isla Chipre.
De acuerdo con el parte policiaco elaborado por los elementos de la SSPM y leído por el fiscal, ese día los policías Adrián Maximuto Dórame y Luis Humberto Castrellón Hernández viajaban a bordo de la unidad 015 e iban acompañados por elementos a cargo de las patrullas 008 y 664 cuando observaron que el conductor de una camioneta Trail Blazer con engomado B-08287 se pasó un señalamiento vial de alto y ellos le marcaron el alto.
Pero los civiles no se detuvieron, por lo que comenzaron a perseguirlos y en determinado momento el copiloto de la Trail Blazer se asomó por la ventana y disparó en tres ocasiones contra los uniformados. Uno de los impactos pegó contra el espejo retrovisor de la unidad 015, dijo el fiscal.
Los dos ocupantes de la camioneta llegaron a una casa ubicada en la calle General Treviño y dejaron el portón abierto, por lo que los municipales también se metieron y al observar que uno de los masculinos portaba un arma, Maximuto Dórame le disparó en el hombro derecho, luego sometieron a todas las personas y encontraron una arma calibre 9 milímetros con 12 cartuchos.
Ayer el abogado defensor dijo que tres de sus representados no habían cometido ningún delito sólo se los llevaron por estar en la vivienda; también llamó a declarar a Ricardo y Miguel Ángel.
El primero de ellos dijo que él se encontraba en uno de los cuartos cuando muchos policías entraron y le apuntaron con armas de fuego y uno de los elementos le disparó.
Señaló que cuando se encontraba internado Maximuto entró a verlo y le dejó caer pólvora en las manos de unos casquillos y cuando fue trasladado a una estación policiaca lo colocaron en una llanta para torturarlo, le pusieron una bolsa de plástico en la cabeza.
Miguel Ángel Vázquez declaró que él tenía unos 10 minutos de haber llegado a la casa de su hermano Ricardo pues venía de trabajar en la obra, cuando los municipales tumbaron una puerta para meterse, le dieron un disparo a su familiar y a todos los tiraron al piso y los golpearon.
Luego de la declaración de Ricardo y Miguel Ángel el defensor expuso que no se justifica la intromisión de los elementos de la SSPM en la vivienda pues no tenía autorización y tampoco estaba en riesgo la vida de los agentes.
Al final la juez dijo que en el arresto de Ricardo y Miguel Ángel no se advertía violación a sus derechos y que la detención de los otros tres sí fue ilegal, pues aunque en la casa se hubiera encontrado un arma primero se debe investigar y luego detener y no a la inversa.