Alejandro Vargas
El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— Especialistas en derecho concordaron en que las medidas de reacción que Estados Unidos tomó para replegar a los migrantes que intentaron ingresar por la fuerza a su país por la frontera de San Ysidro no representan una amenaza que pudiera despertar un conflicto bélico con México, ya que la agresión no fue en contra de representantes del Estado.
En entrevista, Eduardo Mariscal, presidente de la Barra y Colegio de Abogados, y Óscar Altamirano, catedrático en derecho de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), mencionaron que la situación habría sido distinta si los norteamericanos hubieran agredido por ejemplo “a un soldado”.
“No puede considerarse una declaratoria de guerra porque no es una agresión hacia el país propiamente dicho. Fue una agresión hacia ciudadanos civiles, diferente sería que le dispararan al Ejército o a la Policía (…) Es un abuso de autoridad, y se exponen inclusive (los norteamericanos) a que la otra parte, al ver que les están disparando, también repelan una agresión”, comentó Mariscal.
Agregó: “Fue una agresión sin fundamento con el propósito de amedrentar, ciertamente”.
A su vez, Altamirano concordó con la opinión de Mariscal, y mencionó que la acción de los migrantes que buscaron ingresar a la fuerza a los Estados Unidos es una respuesta al rechazo y abandono de los gobiernos que los “han dejado caminar a la buena de Dios” sin que les ofrezcan caminos institucionales para la obtención de asilo político.
Puntualizó: “Ellos simplemente han reaccionado. Estados Unidos tiene los mecanismos institucionales para resolver el asunto. No me explico por qué ha tenido que utilizar la violencia”.
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