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El Diario de Juárez
Ciudad Juárez— Conduciendo en primer grado de ebriedad y tras cometer una falta vial, fue detenido ayer el primer visitador de los Derechos Humanos, Adolfo Castro Jiménez.
Los agentes de Tránsito lo sorprendieron manejando de manera errática y le marcaron el alto, cerca de las 7 de la tarde.
Salió de una cena y se había tomado unas copas de licor y por ello fue llevado ante un médico del Centro de Recuperación Cívico Total (Cerecito) donde permaneció dos horas, hasta que promovieron un amparo que le permitió abandonar la celda.
El derechohumanista reconoció que había consumido alcohol y que fue tratado con respeto en todo momento.
"Salí gracias a un amparo, no me dieron facilidades, voy a regresar para cumplir con la sanción en sábados y domingos próximos', informó.