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Los huecos en el muro de Trump

Martín Orquiz
El Diario de Juárez

2018-10-15

Ciudad Juárez— Al tiempo que la construcción del muro de bolardos –ordenado por el presidente Donald Trump– avanza entre El Paso y Juárez, en el extremo norponiente de la mancha urbana de esta ciudad existe un punto desprovisto de esta estructura o cualquier tipo de valla o barrera.
Este “hueco” es utilizado por personas que intentan cruzar sin documentos o “meter otras cosas”, dicen vecinos.
Una de las peculiaridades de esa zona, enclavada en la colonia Rancho Anapra, es que a unos 50 metros (164 pies) de la valla metálica erigida por el Gobierno de EU mexicanos edificaron sus viviendas, justo debajo de la ladera de la montaña que alberga la escultura del Cristo Rey.

Anaprenses coexisten con el muro y los ‘migras’
“Las cosas cambiaron mucho aquí, sobre todo desde que terminaron de poner ese muro, ya no viene tanta gente, todavía vienen algunos, pero es peligroso hablar de eso”, comentó uno de los vecinos.
La estructura metálica termina, o comienza, a unos 3 metros (9.8 pies) del principio de la falda de los cerros que se ubican del lado estadounidense. En ese espacio, donde la valla fronteriza resulta inexistente, las autoridades colocaron una barrera de concreto de aproximadamente un metro de altura.
Cruzar al otro lado parece fácil, pero no lo es, dijeron vecinos. Muy cerca de ahí, añaden, hay patrulleros fronterizos a la expectativa de que alguien pase a territorio de EU para detenerlo.
“Desde aquí no se alcanzan a ver, pero ahí están”, comenta Víctor, un habitante del sector.
Manifestó que las cosas comenzaron a cambiar desde que el muro –que parte de Santa Teresa y se extiende por Sunland Park– fue instalado hace unos meses y que ya no se registra tanto tránsito de personas en busca de ingresar a Estados Unidos sin papeles.
“Creo que se van por otros lados, más para allá”, añadió al tiempo que señalaba hacia el poniente.
Acerca de lo que representa vivir tan cerca de la línea limítrofe y del muro de Trump, Víctor dijo que lo tiene sin cuidado porque la situación no lo afecta.
“Yo tengo mi ‘jale’ (empleo) aquí, me da igual si lo ponen o no”, aseguró.
El proyecto del muro de bolardos tiene un costo de 73 millones de dólares y deberá estar concluido para febrero de 2019. Mientras tanto, el Gobierno de EU ordenó la instalación de un muro con las mismas características en el Centro de El Paso. A partir del Barrio Chihuahuita la muralla abarcará 4 millas (6.4 kilómetros), pasando por debajo del puente Santa Fe.

Topa en su patio
Al menos una veintena de familias habita sobre la calle Isla de Sacrificios, paralela a la línea fronteriza, entre Salmón y Zacatecas.
Algunos de los patios traseros topan con el terreno agreste de los cerros que limitan de forma natural a los dos países, pero otros, donde hay planicie, tienen a sus espaldas el muro de metal oxidado que se extiende hacia el poniente desde ese punto.
Con esa estructura, de 18 pies (5.5 metros) de altura, el Gobierno de Estados Unidos reemplaza la vieja valla fronteriza.
En la página de Seguridad Interior (Homeland Security) de Estados Unidos www.dhs.gov se informa que en esa zona se instala un tramo de 20 millas (32 kilómetros), que programan terminar en marzo de 2019.
Jesús y Mariana forman una pareja que llegó a vivir a Isla Sacrificios en una casa de renta hace aproximadamente siete meses. Ellos mencionan que no notan mucho movimiento de personas extrañas en el lugar durante el día, pero que desconocen lo que ocurre por las noches.
“Pasa muy poca gente, casi no se ve, nada más los que van a Cristo Rey”, declaró el hombre en referencia a la estatua de Jesús que se alcanza a ver en la parte más alta del cerro.
En cambio, otro de los habitantes del lugar que no quiso proporcionar su identidad, indica que todo ese sector es peligroso.
“Nosotros no nos metemos con nadie, no queremos decir nada porque somos gente de paz, pero aquí es peligroso, peligrosísimo”, comentó antes de apresurar a su hijo adolescente a que se meta a su casa. 

morquiz@redaccion.diario.com.mx
 

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