Javier Olmos
El Diario de Juárez
Los ataques contra políticos en zonas serranas del estado que presentan mayores niveles de violencia en el estado han sido constantes este año.
El último caso es el del alcalde electo de Gómez Farías, Blas Juan Godínez, hijo del médico del mismo nombre secuestrado en noviembre de 2017.
Pero su municipio vecino, Ignacio Zaragoza, también ha registrado casos de violencia política en este proceso electoral.
El 6 de mayo pasado se vivió una jornada violenta que dejó varios ataques contra candidatos y dirigentes del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dejando por lo menos a una mujer asesinada.
Ese día comandos armados quemaron sus casas y negocios, y asesinaron a ocho personas, entre ellas la candidata a regidora Liliana García Mendoza.
Reyes Felipe Mendoza Pérez, exaspirante a alcalde en esa localidad, sufrió una serie de ataques a sus domicilios y negocios.
Tras las agresiones, los dos desaparecieron y la situación orilló al PRD a abandonar la contienda electoral.
El líder en el estado del partido del Sol Azteca, Pavel Aguilar, dijo que la violencia ya sobrepasó a la autoridad.
“No supimos nada, sabemos que Reyes Felipe está bien. Sandra también fue encontrada viva a las orillas de la ciudad”, refirió.
“Entendemos que hay una circunstancia que ya sobrepasó las condiciones de la autoridad. Esperamos que en alguno momento tengan alguna condición de orden y de control, porque ahorita es obvio que no existe.
“Lo que pasó en San Juanito, lo que pasó en Gómez Farías, son circunstancias en las que no tenemos un orden”. Dijo que no hay contención de parte de la autoridad contra quienes ejercen la violencia.
Suman cinco políticos asesinados en Chihuahua durante el actual proceso electoral, de acuerdo con el conteo periodístico.
De hecho Chihuahua ocupa el sexto lugar de las entidades con mayor violencia política registrada en el país, de acuerdo con el seguimiento.
El 7 de mayo pasado también fue asesinado el líder del Partido Encuentro Social (PES) en Chihuahua, Eduardo Aragón Caraveo.
En la cuenta también está el caso del tesorero del Ayuntamiento de Ignacio Zaragoza, Guadalupe Payán Villalobos, liquidado por la espalda en marzo de este año.
Además está el homicidio del regidor del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Diego Herrera Escárcega, caído en enero junto con su hijo Gumaro Herrera, el extesorero Fernando Herrera y Raúl Herrera Cervantes, este último comandante de la Policía de El Vergel en la administración pasada.