Gabriela Minjáres/
El Diario
Mientras todos los empleados municipales recibieron un aumento salarial este año y los sindicalizados negocian un segundo ajuste, sus aportaciones al Fondo de Pensiones y Jubilaciones no se han incrementado, por lo que el fideicomiso se mantiene inoperante y en “contingencia”, bajo riesgo de crisis.
En estas condiciones, el Fondo podría solventar apenas un año de sueldo a los 2 mil 755 burócratas que ya se retiraron o a los familiares de trabajadores fallecidos, que hasta el primer semestre de 2016 se tenían registrados como derechohabientes, según datos oficiales.
De acuerdo con el último reporte de ingresos y egresos del Municipio que corresponde a mayo de este año, el Fondo acumulaba poco más de 431 millones de pesos, casi la misma cantidad que se requiere para cubrir el gasto anual que se hace en pensionados y jubilados.
Aun cuando desde abril el Ayuntamiento aprobó duplicar las aportaciones al fideicomiso, hasta ahora no se aplica el descuento de 4 por ciento al salario de los empleados y, por lo tanto, tampoco el Gobierno local ha incrementado sus contribuciones.
Tan sólo para este año, el Municipio proyectó un presupuesto de 409 millones de pesos para pensionados y jubilados, lo que cubre del gasto corriente porque de utilizar el fideicomiso en el que se acumulan las aportaciones del Gobierno y sus trabajadores para garantizar el pago de pensiones y jubilaciones, en un año se quedaría prácticamente sin recursos.
“A ese fondo le metemos y no le sacamos ni un quinto, es un fideicomiso que en un momento dado, cuando avance el tiempo, va a tener mil millones de pesos y de ahí se va a poder empezar a pagar a pensionados y jubilados, pero hasta ahorita no le sacamos nada, ni un centavo, ninguna administración le ha quitado un peso”, afirma el tesorero municipal, Miguel Orta Vélez.
Aunque menciona que algunas administraciones pasadas hicieron sólo aportaciones parciales y otras de plano no entregaron lo que correspondía por falta de liquidez, como ocurrió en los trienios de 2007-2010 y 2010-2013, encabezados por José Reyes Ferriz y Héctor Murguía Lardizábal, que por la crisis de seguridad en Ciudad Juárez se quedaron sin recursos para cubrir esta obligación.
Sin embargo, a la fecha tampoco se aporta lo que le corresponde.
Actualmente, a los empleados municipales que aportan al fondo se les descuenta vía nómina el 2 por ciento de sus ingresos brutos, mismo porcentaje que aporta el Municipio, como se establecía en el anterior Reglamento de Pensiones y Jubilaciones para los Trabajadores al Servicio del Municipio.
Será hasta después de que se apruebe la revisión del contrato colectivo que se celebre entre el Sindicato Único de Trabajadores del Municipio (SUTM) y el Municipio, cuando se empezará a realizar la retención del 4 por ciento al trabajador y el gobierno aportará lo correspondiente.
Lo que, de acuerdo con el nuevo reglamento publicado el 4 de junio de este año en el Periódico Oficial del Estado, entrará en vigor el 11 de octubre de este año, es decir, hasta después de que asuma la próxima administración municipal.
Para entonces, de acuerdo con lo estipulado en el convenio de trabajo celebrado entre el Sindicato y el Municipio que se encuentra vigente, se habrá negociado el aumento salarial, como lo pretenden los líderes de la organización gremial y por ley se debe revisar por lo menos a más tardar el 10 de agosto.
“Todavía no se descuenta el 4 por ciento, será hasta después de que pase la revisión del contrato, podría ser este año fiscal, el 11 de octubre, depende de los acuerdos” señala el oficial mayor, Hugo Alonso Venzor Arvizo.
Esta información también fue confirmada por el tesorero municipal y el secretario del Trabajo del SUTM, Héctor Raúl Cano Villela, quienes reiteran que será después de negociar el contrato colectivo cuando el porcentaje de retención a los trabajadores y la aportación del gobierno se apliquen como se avaló en abril.
“Ya está el reglamento publicado por el Congreso del Estado, nomás falta que en la plática con el Sindicato se incremente la aportación que realiza el empleado y el Municipio; eso será a partir de que cobre vigencia el contrato colectivo”, expone el tesorero.
Mientras que Cano Villela agrega que si bien es una situación que repercute a todos los trabajadores y lo ideal es que se fortalezca el Fondo para que se independice el sistema de pensiones y jubilaciones del gasto corriente, se trata de un asunto que le corresponde al Municipio.
“Ahí quien tiene que evaluar el impacto es la Presidencia, siempre lo he dicho a lo mejor un tanto cómodo: mientras me sigan jubilando a mi gente ¿qué me preocupa? Porque no me han suspendido a mí ninguna jubilación de mi gente”, expone.
Ello, porque considera que al final de cuentas los trabajadores pensionados o jubilados sindicalizados son los menos.
El nuevo reglamento establece en el artículo séptimo transitorio que la retención del 4 por ciento al salario de cada trabajador y la aportación del Municipio “se realizará posterior a la revisión del convenio de trabajo que se celebre entre el Sindicato” y el Municipio, que entrará en vigor el 11 de octubre de 2016.
Mientras que también quedó establecido que la retención a los trabajadores y la aportación del gobierno, la podrá incrementar el Ayuntamiento de un año fiscal a otro, pero nunca podrá ser inferior al del año inmediato anterior, con lo que las autoridades esperan hacer solvente el Fondo en un futuro.
“No hay una crisis como tal, lo veo como una posible contingencia, porque si bien es cierto ahorita hay gente que se está jubilando a una edad muy joven y que van a vivir muchos años del erario, ese sector cada vez se va reduciendo porque todos los que fueron contratados de 2005 en delante ya no pueden jubilarse si no tienen 60 años”, considera el tesorero.
“Evidentemente hay que ponerle atención a este asunto, hay que tratar de resolverlo, pero es un problema que está viviendo una de las crisis más fuertes; en cinco o siete años esto va a desaparecer”, agrega.
Para el oficial mayor esta situación se deberá equilibrar en algún momento, aunque a ciencia cierta no sabe cuándo, porque todo depende de que se cumpla con las retenciones y las aportaciones, pero que éstas aumenten también cada año.
Actualmente, unos 6 mil trabajadores realizan la aportación del 2 por ciento.
“Lo importante ahorita es ir del 4 al 8 por ciento en total, entre retenciones y aportaciones, ya después se deberá pensar en ir del 8 al 10 por ciento y así sucesivamente para ir en la dirección correcta, pero eso ya le corresponderá a la siguiente administración”, menciona. (Gabriela Minjáres / El Diario)
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