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Pese al calor, huéspedes del Parque Central están sanos

Maricela Morones/
El Diario

2016-07-22

A pesar de las altas temperaturas que se registran en la ciudad, los encargados del Parque Central aseguraron que los animales del lugar se encuentran sanos y no han tenido necesidad de establecer medidas de prevención, se indicó.
Se trata del lado poniente del parque, donde se encuentra el lago, el cual es un hábitat ideal para patos y tortugas principalmente.
Jesús Francisco Yépez Huerta, supervisor de áreas verdes del lugar, explicó que los más de mil patos que ahí radican no tienen un cuidado especial, pues en el verano ellos mismos se resguardan en el agua y bajo los árboles.
En el caso de la jirafa Modesto, argumentó que debido a su condición de cautiverio solamente necesita un lugar en donde resguardarse del viento ya que el clima extremoso no le afecta.
“Hace mucho calor pero la piel de la jirafa es tan gruesa que no tiene ninguna afectación, además tiene su casita y ahí se resguarda; lo que le puede llegar a afectar es el viento, pero ahorita está muy bien al igual que los otros animales”, mencionó el supervisor.
En el Parque además viven dos avestruces machos y diez pavorreales y Yépez mencionó que cuando se acerca octubre llegan parvadas de hasta 300 patos silvestres; se trata de aves migratorias, algunas se quedan durante todo el otoño e invierno y vuelven a irse en primavera. Esto provoca un aumento considerable en la población animal.
Lo que sí, dijo, es que en el verano aumentan los malos olores del lago y por eso hace aproximadamente dos meses se está utilizando un químico, para aminorarlos.
“El mal olor se debe a que mucha gente les avienta comida a los patos y se estanca en el fondo del lago, ahí se descompone es entonces cuando empiezan los olores putrefactos”, declaró que supervisor.
Este proceso de tratamiento del agua se realiza para evitar que las aves puedan contagiar a los visitantes con alguna bacteria.
Hace dos años llegaron dos pelicanos, duraron un par de meses y posteriormente emigraron.
Además inquirió que toda el agua que se utiliza para el lago y el riego de los árboles es tratada. “A veces los niños juegan, se mojan en los aspersores y esa agua está limpia, no se puede tomar pero tampoco les causará una enfermedad”, expresó el hombre.

mmorones@redaccion.diario.com.mx

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