Horacio Carrasco/
El Diario
Ninguna de las cinco organizaciones de comerciantes de autos usados que el jueves pasado dieron un ultimátum al Gobierno federal recibió respuesta alguna a las peticiones que hicieron.
Alberto Rivera Gutiérrez, líder del tianguis automotriz La Curva Perimetral que opera en la avenida Carlos Amaya, dijo que el plazo de un día dado al Gobierno de la República simplemente transcurrió sin que nadie se comunicara con ellos.
El jueves pasado, cinco grupos de vendedores dieron un ultimátum a la Federación: tenía el viernes para crear un programa de importación de vehículos a la frontera, de lo contrario, a partir de mañana lunes habrá una serie de medidas de presión que serán permanentes y radicales.
Ese día, unos 70 comerciantes se reunieron en el local del tianguis Renacimiento La Curva que opera en eje vial Juan Gabriel y Francisco I. Madero, y tomaron algunos acuerdos.
Las demandas de los comerciantes son dos: que se cree un programa de importación para autos usados, y, que se les permita internar unos 4 mil vehículos que adquirieron a la subastadora Copart antes del 16 de este mes.
Sucede que esa fecha el Servicio de Administración Tributaria (SAT) dio de baja a esa compañía y ahora ellos no pueden internar los muebles que le compraron porque sus facturas ya no son válidas para pago de impuestos.
Además hay más de 25 mil vehículos en poder de la sociedad civil y de los vendedores, lo que hace necesario que se cuente con un programa de importación.
Ayer, al ver que no hubo respuesta al ultimátum, los dirigentes de los tianguis comenzaron a comunicarse entre sí, pero no definieron aún medida alguna.
Es probable que este día se organicen o que desistan de manifestarse.
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