Martín Coronado/
El Diario
La empresa juarense Grupo Tomza le arrebató a Pemex gran parte del mercado de Gas Licuado de Petróleo (LP), al grado que la paraestatal prefirió dejar de traer el combustible del exterior y está batallando para colocar el poco combustible de ese tipo que produce en México.
El gerente general de la compañía, Saúl Delgado Figueroa, dijo que por las oportunidades que plantea la reforma energética para el sector privado, la capacidad e infraestructura de la empresa y la planeación estratégica del grupo lograron distribuir el gas importado por cuenta propia en 18 estados de todo el país, donde antes Pemex era el único que lo hacía.
El director comercial de Pemex Transformación Industrial, Marcelo Parizot Murillo, señaló al diario El Economista que las empresas privadas están importando con mejores precios, al grado de que desde mayo la paraestatal ya sólo introduce al país cantidades mínimas del energético, dejando esa función a Grupo Tomza y a otra empresa que opera en el centro de la República.
Agregó que ante el embate de las importaciones del sector empresarial ahora Pemex tendrá como prioridad acomodar su producción nacional y para ello tienen que ofrecer un descuento de 13% frente al precio del mercado del sur de Texas, más transporte.
Por su parte, Delgado informó que gracias a la infraestructura que tiene la empresa juarense, en sólo tres meses lograron sustituir gran parte de las importaciones de la petrolera mexicana, capitalizando las oportunidades que abre el sector energético para este año.
Grupo Tomza fue formado hace 50 años bajo el liderazgo de Tomás Zaragoza Fuentes, y la firma se califica como el líder en la distribución de gas Licuado de Petróleo en México y Centroamérica. Genera 15 mil empleos directos.
Entre su infraestructura tiene tres terminales marítimas, una en Tuxpan, Veracruz –desde donde surte al sur del país– y otras dos en Honduras, desde donde abastece de gas a ese país, Guatemala, El Salvador y Costa Rica.
En México tiene cuatro terminales terrestres en Juárez, Tijuana, Nogales y Reynosa, desde donde abastece a una gran parte del norte del país. La distribución la hace desde más de 100 plantas almacenadoras.
Para allegarse de gas importado, principalmente de Estados Unidos, utiliza tres buque-tanques de 45 mil toneladas cada uno, los más grandes a nivel mundial en su tipo. Para el transporte terrestre la firma utiliza sus 200 tractocamiones de 45 mil litros cada uno.
Delgado Figueroa indicó que la apertura para que las empresas pudieran importar gas se dio en febrero de este año y en tan sólo tres meses ya Tomza ya tienen la mayor parte del mercado.
Parizot Murillo dijo que dado que la iniciativa privada ha tomado el liderazgo logrando importaciones a mejores precios, la paraestatal prácticamente ha dejado de traer gas LP del extranjero.
“Prácticamente ya no estamos importando, sólo muy poco por Ciudad Juárez, pero ya nada en el Golfo de México. Lo que sucede es que el precio al público está más alto que el precio de importación de Pemex, por lo que es muy atractivo. Sin embargo, el siguiente año cambiará la situación, porque se libera el precio y entonces el costo internacional será la referencia y Pemex podrá ser muy competitivo”, explicó el funcionario a El Economista.
Añadió que el mercado mexicano de gas LP consume diariamente 285 mil barriles diarios, de los cuales Pemex importaba 85 mil barriles al día y se producían en promedio 200 mil.
“Más que enfrentar una crisis, lo que estamos haciendo es reaccionar y empezar a exportar butanos”, indicó.
El directivo también dijo que por la frontera norte se importan 50 mil barriles y el resto por el Golfo de México. La Secretaría de Energía ha dado los permisos de importación y ya todo lo que se importa es por y para consumo privado. Por las diferencias de precio, no se puede competir directamente en estos momentos. (Martín Coronado/El Diario)
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